A ver la película no es ni de lejos para nota, pero vamos, ¡ni por asomo!.

Es una película oscura, muy lenta y quiere al final dar un giro pero, a mi entender, no lo consigue. Únicamente me quedo con la actuación de Jim Carrey, el cual tiene el "rostro impenetrable" durante todo el film, no transmitiendo ninguna emoción, aunque he de reconocer que la actuación es muy correcta, en un registro en el que habitualmente no se ha movido.

Realmente mala no es, pero no es tampoco ninguna "obra maestra". A destacar lo terriblemente lenta que resulta que en gran medida echa para atrás a mucha gente a mitad de película.

Yo NO la aconsejo.