Click here to copy URL
Spain Spain · West Coast
Dabi rating:
4
Mystery. Thriller. Drama Alice, a private investigator, checks into a psychiatric hospital feigning paranoia with the goal of collecting evidence for the case she is working on: the death of an inmate in unclear circumstances. But the reality she faces in her confinement will exceed her expectations and cast doubt on her own sanity. An unknown and exciting world will open before her eyes.
Language of the review:
  • es
October 6, 2022
114 of 164 users found this review helpful
Los renglones torcidos de Dios es la segunda adaptación de la novela homónima de Torcuato Luca de Tena y la cuarta película del cineasta español Oriol Paulo (quinta si contamos un telefilm que rodó allá por los 2000). El libro en el que se basa es bastante conocido y tiene una base de fans acérrima, pero yo tengo que reconocer que no lo he leído, así que no puedo opinar sobre si es una adaptación fiel o no. Supongo que no demasiado porque, de ser así, dudo que la novela estuviera tan bien considerada. Y es que en Los renglones torcidos de Dios, Oriol Paulo vuelve a recurrir a sus peores instintos como guionista, aunque también os digo una cosa: debí vérmelo venir. ¿Por qué iba a esperarme algo distinto de Paulo a estas alturas?

Supongo que tu afinidad por el cine de Oriol Paulo depende en gran medida de tus prioridades a la hora de consumir un trabajo narrativo, y aquí para gustos, los colores. A mí, esta concepción que tiene Paulo de las historias como puzzles que hay que resolver me da bastante pereza. Para él, escribir un guion es hacer gimnasia artística: piruetas y tirabuzones. Y bajo la superficie, la nada más absoluta. Escasísima caracterización de personajes y nula profundidad temática. Lo que a mí me interesa en una historia, a Paulo, por desgracia, le importa entre cero y una mierda.

A esta falta de cuerpo le sumamos el esquema narrativo en el que la obra se mueve, que es este constante y, al final, agotador "¿la protagonista está loca o no?". Las elecciones que toma Oriol, sumadas a la naturaleza misma de la historia que está adaptando, son extremadamente limitantes. Y es que, ¿de dónde vas a sacar tiempo para caracterizar a tus personajes si tu única preocupación es hacer carambolas y tirar de truquitos para distraer a la audiencia, truquitos que, dicho sea de paso, en la mayoría de los casos no significan nada? Por no hablar de que, para más inri, la película dura dos horas y media. Ciento cincuenta putos minutos y es incapaz de desarrollarte de manera satisfactoria a un solo personaje, ni siquiera a la protagonista, que es el centro absoluto de toda la trama. Es demencial.

Visualmente, tampoco es que haya demasiado que destacar. La factura técnica es correcta, no vamos a decir lo contrario, pero el montaje es a veces algo torpe, y para ser un tipo decidido a moverse en el thriller, Paulo no consigue conjugar una atmósfera inquietante, sospecho que por lo mismo: porque no le interesa. Yo creo que estaba tan preocupado por sus giritos de mierda que ni siquiera se ha parado a reflexionar en cómo hacer que el apartado visual contribuya a construir la atmósfera tensa y malsana que, por el propio carácter de la historia, esta película debería poseer.

El único aspecto de esta película en el que se encuentran elementos dignos es el interpretativo. Paulo, a pesar de sus defectos, es un competente director de actores, y aquí todos ellos cumplen. Bárbara Lennie es, en mi opinión, la mejor actriz española que tenemos ahora mismo, y creo que hace todo lo que está en su mano por dotar de vida a Alice, regalándonos un par de escenas que son un éxito únicamente gracias a su enorme talento interpretativo. Eduard Fernández, a pesar de lo tediosamente unidimensional que es su personaje, siempre consigue hacer un buen trabajo, mientras que el resto del reparto acompaña con solvencia y salen del paso con lo poco que el guion les ofrece.

En definitiva, no, no puedo decir que Los renglones torcidos de Dios me haya gustado. Yo no sé si es que con los años le he ido cogiendo cada vez más aversión a la forma que tiene Oriol Paulo de hacer cine, pero creo que esta me ha parecido la película más irritante de toda su filmografía. Creo que, de haberse dedicado más a contar una historia y menos a buscar el soplido de sorpresa fácil en la audiencia, si hubiera frenado solo un poco sus tendencias efectistas y si hubiera dejado a la trama respirar de vez en cuando, el resultado habría sido mucho más sólido, porque se perciben atisbos de lo que podría ser un relato demoledor. Pero claro, en ese caso no estaríamos hablando de Oriol Paulo. Por mi parte, no es una recomendación.

Calificación: Mala/Insuficiente
Dabi
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow