Podría haber sido la mejor película de guerra de todos los tiempos, y en muchos aspectos tal vez lo sea, sobre todo en lo técnico, pero como película comete demasiados fallos imperdonables.
Da la sensación de estar ante una obra colosal enfocada desde un punto de vista demasiado pasteloso, un trasfondo mediocre para una película que merecía otra cosa.
Las escenas de combate son lo mejor de la película, te hacen meterte de lleno en la acción, en ocasiones llegas a agacharte para que alguna bala perdida no te alcance. Especialmente intensa es la primera media hora, la del desembarco, me parece una de las secuencias más impactantes que he visto jamás. Sin embargo pronto empieza el pasteleo, el patriotismo, los héroes caídos... ¡cuanto topicazo por Dios! Es imperdonable que una película tan bien rodada, tan intensa, tan real, lo eche todo a perder convirtiéndose en una empalagosa americanada.
Hubiese sido bueno obviar todo ese patriotismo y centrarse en narrar la guerra, sin más, con toda su crudeza, sin más adornos ni florituras. Y ha estado cerca de conseguirlo, porque ninguna película nos enseña la guerra desde tan adentro como esta, pero en vez de hacer la que podría haber sido la parte "trincheras" de su Lista de Schindler, Spielberg prefirió hacer la "Titanic" de la guerra, una pena.