Doctor sueño adolece de las virtudes y defectos de la novela homónima de Stephen King, y con algunos de los aciertos del brillante film de Kubrick.

Analizando con respecto al libro entre los defectos principales está la falta de ritmo narrativo, y el tono totalmente diferentes del libro anterior, y sobre los aciertos la manera de mostrarte ciertos personajes.

Sobre los aciertos con respecto al film de Kubrick el metalenguaje del tramo final del film.

Sobre la película en sí misma decir que el director Mike Flanagan nos regala un par de secuencias espectaculares y un sentido homenaje a los ya iconos del film de Kubrick, y todo con un estilo depurado y en ocasiones exquisito. Como defecto en este segundo aspecto es que quizás abusa excesivamente de estos homenajes quedando a veces fuera de lugar, tanto por el uso constante de las mismas partituras de la película precedente (incluso en escenas que no casan), o de ciertas imágenes, lo que queda cansino y se desprende todo el terror que daba en la película original que sabía calcular con exactitud milimétrica la presencia en pantalla de estas imágenes.

Finalmente hablaré de las inevitables comparaciones; Como adaptación del libro es brillante, ya que es una magnífica adaptación, salvo el detalle del tratamiento de un personaje en cuestión que para mi gusto, y este punto es personal, lo vi decepcionante (ver spoiler). Con respecto al film de Kubrick como homenaje es genial, muy disfrutable para todos los que amamos esta película, aunque también con sus sombras, pero fílmicamente queda muy por debajo, lo que era obvio, al ser un producto más mainstream, que arriesga poco, manteniendo un estilo depurado pero genérico que incluso usa de vez en cuando scary jump, a diferencia del film del creador de la Naranja mecánica o 2001: Una odisea en el espacio, que pule hasta la extenuación el texto del que bebía para llegar a una esencia terrorífica.

Es una película que gustará sobre todo a los fan de la novela, y a los fan de la película de Kubrick que sepan de antemano que obviamente no van a ver una secuela en cuanto a estilo, tono y forma de aquel director, y que adolece de ser tal vez demasiado persistente en sus homenajes.

En resumen estamos ante una bella piedra, pero El Resplandor de Kubrick es esa misma piedra pero pulida hasta sacar el diamante que hay dentro, le gustara a quien le gustara y pese a quien le pese, hasta pasando por alto al mismísimo King.