"Carry on Regardless" es la quinta película de la serie "Carry On", compuesta por 31 películas de comedia británicas, todas dirigidas por Gerald Thomas y producidas por Peter Rogers. Dentro de la serie, supuso la transición de comedias divertidas con una historia simple y humor blanco a películas con insinuaciones sexuales y escenas con señoras ligeras de ropa que definieron la franquicia.

"Carry on Regardless", en su mayor parte, no tiene una historia sólida ya que se centra en una sucesión de escenas más o menos divertidas en torno a la agencia "Helping Hands" que dirige Sid James y cuyos empleados, procedentes de la oficina de desempleo, se verán obligados a realizar tareas tan peculiares como sacar a pasear a un chimpancé como mascota, saludar a los invitados en una cata de vinos, probar muebles en una tienda o trabajar de supuesta niñera para una señora que quiere poner celoso a su marido. Hay momentos divertidos pero, en general, la trama resulta un poco inconexa lo que perjudica el resultado final.

Lo mejor, sin duda, el magnífico reparto de actores británicos habituales en la serie. Lo peor que es un tipo de humor anticuado, típico de la comedia británica de los 60 que tuvo mucho éxito de público, con bromas subidas de tono y algunas escenas que hoy nos resultan sonrojantes como la de Sid James con una cinta métrica tomando las medidas de Joan Sims y Liz Fraser y otra en la que, haciéndose pasar por médico, ausculta a una serie de enfermeras en ropa interior. Hoy en día se podría decir que es un tipo de humor obsoleto e, incluso, que no es políticamente correcto pero no hay que olvidar que esta forma de hacer humor resultaba muy divertida en esa época, con gran aceptación por parte de todo tipo de público, y como tal debe ser analizada sin caer en un mal entendido presentismo.