Me he dado cuenta de que el “biopic” es uno de los géneros que más me suele decepcionar en general. Y es que hay obras de arte o acontecimientos importantísimos en la historia, pero que eso no siempre implica que la vida de los que los llevaron a cabo pueda llegar a ser tan interesante. De hecho, hay muchas muestras de que adaptar estas vidas al cine puede dar lugar a títulos tremendamente aburridos, a pesar de los medios, reparto y puesta en escena con los que puedan contar.
Me vienen a la memoria films como “Tolkien”, “Pollock” y “Mary Shelley”, entre otros, capaces de aburrir a una convención de ostras, aunque la obra de sus personajes tenga su repercusión.
Pues bien, me temo muchísimo que esta biografía de Gustav Eiffel puede entrar en ese triste saco, por lo menos en mi opinión.
El relato de la construcción del símbolo de París, se me antoja tedioso. Sé muy bien que no procedería extenderse demasiado en detalles de ingeniería, pero el film más bien tira por otro camino bien distinto. Se centra en el romance, que según lo visto aquí le influyó en su obra, cosa de la que no tengo ni idea de si será verdad. Y aunque la ambientación del siglo XIX no está mal, este enfoque sentimental no me termina de convencer.
Al menos, durante algunas secuencias sí que podemos aprender nociones de cómo se hizo, y atisbar algo de la grandiosidad que supondría la elevación de tal monumento con los medios de la época y gran parte de la sociedad en contra, pero todo ello es solo un porcentaje pequeño de la duración de la película. Al final, se empeñan en distraerse con el romanticismo y estropear su propio potencial.
Como mucho, diría que es mediocre, aunque personalmente ni siquiera ha llegado a gustarme.