Justo el inicio apunta bien, presentando los Telmarinos y su trama de corruptelas, e igualmente la llegada de los 4 hermanos a Narnia y el percatarse del mucho tiempo que ha pasado y lo mucho que han cambiado las cosas.
Pero inmediatamente empieza el gran problema de la película: la banalización de la violencia y la muerte ajena. Lo cual para un cuento infantil no parece lo más adecuado.
Por qué disparan a matar a dos pobres soldados, que son unos pobres desgraciados cumpliendo órdenes, para salvar a un desconocido. Por qué identifican a unos como "malos" y al prisionero como "bueno". De hecho el otro enano al final resulta ser "malvado".
Y por qué ese ser supremo que representa Aslan, que con tanta facilidad revierte el resultado de la batalla no interviene antes. Esa gran bondad que se suponía que derrochaba, queda muy ensombrecida con las muertes de multitud de criaturas de ambos bandos.