Narra como una mujer recibe la visita de un chico que dice ser su hijo. Sin embargo y como suele pasar en las películas para televisión de las muchas emitidas es que nada es lo que parece, que resuta siendo lo que todos sabemos. Con todo el film de Jackson cumple a la perfección en el tema de suspense y caracterización de los personajes, mostrando las dos caras del protagonista y realizando el mejor trabajo interpretativo por parte de Kraulis. No es una maravilla y seguramente hayan visto mil veces el planteamiento, pero en líneas generales la película resulta un grato entretenimiento.