Le he puesto un siete pero, la verdad, ni yo misma tengo idea de lo que acabo de ver. No se si ha sido una maravilla, un mojonazo o el resultado de una buena fumada de un porro, y mas bien creo que esto último. Su inicio tan contenido, con una critica muy acertada al racismo que se vive hoy en Estados Unidos por las personas mas supuestamente tolerantes, os puede hacer creer que estáis viendo otra cosa, pero que no os engañen: al final el guionista se pasa tres pueblos y nos planta en la cara una ida de olla de esas que hacen historia. De echo, si me lo encontrara por la calle no sabría si darle un aplauso por rompedor o aconsejarle, por su bien, que visitara a un psicólogo un ratito.

En fin... supongo que será una película que la gente no olvide. Se le aparecerán detractores, y otro tantos defensores acérrimos. Además de, por supuesto, una multitud de parodias. Porque si algo me queda claro (y muy claro) de Dejame Salir es que sino conecta contigo como película de terror o intriga, siempre te la podrás tomar a cachondeo. El resultado será el mismo: ni sabrás como tomarte lo que has visto.