Un hombre y una mujer se amaron en Indochina, durante la guerra, pero posteriormente, una vez en Tokio, no pueden revivir sus tiempos felices. Tampoco es fácil. Él, Yukiko, es un hombre mujeriego pero enormemente desgraciado por no ser capaz de amar; ella, Tomioka, muy enamorada, lo seguirá hasta la humillación y la locura. Nubes flotantes es una de las mejores películas de Mikio Naruse. Como es habitual en su cine, la mujer se halla en una posición de marginación social; en este caso, debido al adulterio — él está casado — y a su relación con un soldado americano, con el que prácticamente se prostituye a causa de la pobreza. Naruse asocia certeramente la degradación moral del Japón de la posguerra con la de la pareja, y la puesta en escena se decanta por la sordidez y la oscuridad. Estupendo melodrama, prodigio de sensibilidad y penetración psicológica