Me gusta Enrique Urbizu. Me gustan los directores que intentan salirse de los caminos trillados del cine español, y hacen algo diferente.
Pero que sea diferente no quiere decir que tenga que ser sobresaliente. Me ha hecho mucha gracia todo el bombo que se le ha dado a esta película, para descubrir finalmente que, tal como me esperaba, es un thriller sin más pretensiones.
¿Entretenida? Sí. ¿Obra maestra? NO, y un NO rotundo además.
Si esta película fuera estadounidense, hubiese pasado sin mucha pena ni gloria, y todos los críticos hubieran destacado los puntos flacos del guión (en spoiler), su evidente falta de originalidad y las actuaciones mediocres (Coronado esta bien, el resto simplemente hacen su papel)
Pero como es un thriller español, todos nos asombramos de que alguien se atreva a hacerlo, y cantamos sus alabanzas y la encumbramos a obra maestra.
Pues no, señores. Es una película aceptablemente bien hecha y entretenida. Pero nada más.