En el fondo me fascina esta película. Consigue un equilibrio entre la más simplona de las americanadas y un experpento que roza lo absurdo. Y aún así, aún pensando que como se pueden gastar dinero en grabar cosas así, se sigue con interes por la originalidad y la excepcionalidad de sus partes. Intenta ser entrañable de la forma más facilona que hasta se convierte en entrañable por eso, por parecer estar hecha por un niño.
Juega con fuego buscando la sensualidad en la niña. Y roza el experpento en las escenas de acción que por otra parte están bien rodadas.
Por todo esto, es una pelicula facilona muy poco facil de hacer, sino todos los directores harian películas nominadas a siete cesar.