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Voto de Martes Carnaval:
4
2022
Ian Brennan (Creador), Ryan Murphy (Creador) ...
5,6
5.625
Serie de TV. Terror. Thriller. Drama. Intriga
Serie de TV (2022-). 1 temporada. 7 episodios. Se suponía que era la casa de sus sueños, pero pronto se convierte en un infierno para la familia Brannock. Las siniestras cartas que reciben de alguien que se hace llamar «el Vigilante» son solo el principio. Enseguida empiezan a salir a la luz los siniestros secretos del vecindario. Inspirada en la historia real de la tristemente célebre casa de Nueva Jersey. (FILMAFFINITY) Renovada por una segunda temporada (T2). [+]
2 de noviembre de 2022
15 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vigilante es una serie fallida.
No se explica el derroche de Netflix en esta producción para un final tan decepcionante. Las interpretaciones son buenas, no se escatiman medios para las localizaciones y escenografías, hay personajes muy conseguidos, algunos giros de la historia son sorprendentes, pero da la sensación que en un momento dado los guionistas están desfallecidos con todo el material que han acarreado a sus espaldas y rematan la faena con lamentable improvisación y pereza.
El problema es que una serie como esta es finalista. El final es el que la va a justificar o a condenar, y, desde luego, la condena.
Uno acaba de ver el último capítulo, y se queda con la impresión de que ha perdido el tiempo viendo los demás, no digo ya ese. Todo se pone en cuestión retrospectivamente y los golpes de efecto que en su momento asombraron, se diluyen por falta de un soporte narrativo final.
La serie es como la típica novela de Agatha Christie, en la que hay un montón de sospechosos de haber cometido el crimen, todos con sus móviles —no telefónicos— contundentes y Poirot en el capítulo final desenmascara al verdadero culpable, basándose en unas pistas, que se habían suministrado en algún momento a los lectores, en mayor o menor medida. Solo que en Vigilante hay una pequeña diferencia que expondré en la zona spoiler.
No se explica el derroche de Netflix en esta producción para un final tan decepcionante. Las interpretaciones son buenas, no se escatiman medios para las localizaciones y escenografías, hay personajes muy conseguidos, algunos giros de la historia son sorprendentes, pero da la sensación que en un momento dado los guionistas están desfallecidos con todo el material que han acarreado a sus espaldas y rematan la faena con lamentable improvisación y pereza.
El problema es que una serie como esta es finalista. El final es el que la va a justificar o a condenar, y, desde luego, la condena.
Uno acaba de ver el último capítulo, y se queda con la impresión de que ha perdido el tiempo viendo los demás, no digo ya ese. Todo se pone en cuestión retrospectivamente y los golpes de efecto que en su momento asombraron, se diluyen por falta de un soporte narrativo final.
La serie es como la típica novela de Agatha Christie, en la que hay un montón de sospechosos de haber cometido el crimen, todos con sus móviles —no telefónicos— contundentes y Poirot en el capítulo final desenmascara al verdadero culpable, basándose en unas pistas, que se habían suministrado en algún momento a los lectores, en mayor o menor medida. Solo que en Vigilante hay una pequeña diferencia que expondré en la zona spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
No se aclara quién es ese misterioso personaje voyeur que da nombre a la serie: Vigilante. Lo que deja muy mal sabor de boca, porque si todo el argumento consiste en identificar a ese personaje y al final no se le identifica, la frustración de los televidentes, o plataformistas en general, está servida
Por otro lado, lo de que la historia está basada en hechos reales tiene toda la pinta de ser un timo-cebo.
Seguramente, alguien compró alguna vez una casa y recibió un anónimo, pero ahí se deben de acabar los parecidos con la realidad.
Otra tara de la serie es el gran número de personajes secundarios al servicio de la nada, o de prolongar la serie, sin que luego se les dé ningún oficio de utilidad. Hace ya más de un siglo se publicó una novela por entregas en una revista, lo que, entonces, tenía por nombre: un folletón. El novelista, muy malo, no hacía más que dar entrada a personajes subalternos de lo más variado en los sucesivos capítulos de su novela. Como en un momento dado, contara ya con muchos y no supiera qué hacer con ellos, los metió en un barco y lo hundió.
El capítulo final es un compendio de horrores: la historia falsa de la detective, perfectamente prescindible, la justicia poética sobre la agente inmobiliaria, apresurada, torpe y forzada, la liga de los superfrikis, todos juntos en unión defendiendo la bandera de la santa tradición y ya el final finalorum: el irresistible hechizo que ejerce la mansión sobre la pareja protagonista, sobre cada uno por su lado. Penoso... muy penoso...
Por otro lado, lo de que la historia está basada en hechos reales tiene toda la pinta de ser un timo-cebo.
Seguramente, alguien compró alguna vez una casa y recibió un anónimo, pero ahí se deben de acabar los parecidos con la realidad.
Otra tara de la serie es el gran número de personajes secundarios al servicio de la nada, o de prolongar la serie, sin que luego se les dé ningún oficio de utilidad. Hace ya más de un siglo se publicó una novela por entregas en una revista, lo que, entonces, tenía por nombre: un folletón. El novelista, muy malo, no hacía más que dar entrada a personajes subalternos de lo más variado en los sucesivos capítulos de su novela. Como en un momento dado, contara ya con muchos y no supiera qué hacer con ellos, los metió en un barco y lo hundió.
El capítulo final es un compendio de horrores: la historia falsa de la detective, perfectamente prescindible, la justicia poética sobre la agente inmobiliaria, apresurada, torpe y forzada, la liga de los superfrikis, todos juntos en unión defendiendo la bandera de la santa tradición y ya el final finalorum: el irresistible hechizo que ejerce la mansión sobre la pareja protagonista, sobre cada uno por su lado. Penoso... muy penoso...