Buenísima película con una puesta en escena totalmente teatral: todo ocurre dentro de una cabaña. Pero la fascinante historia, a camino entre la ciencia ficción, lo mágico y la antropología te engancha y te mantiene en vilo todo el metraje.

La estupendísima dirección hace que haya unos cortes en la estructura narrativa muy acertados que hacen que recuperes la tensión y mantengas la atención ante el increíble suceso que se desvela. Pese a lo "tranquilo" de la ubicación, la alucinante revelación, los cambios de ritmo y el efectista golpe final te entretienen, interpelan y emocionan por igual.

La cámara, los primeros planos y las composiciones te hacen sentirte uno más de los participantes en esta revelación entre amigos. Buenas actuaciones, especialmente la de David Lee Smith, con una mirada honesta y franca que va perfectamente a su personaje.

Una película inteligente, culta, sofisticada, entretenida y muy cercana. ¡Muy recomendable! Una muestra del enorme talento que hubo una vez en los EEUU.