Es difícil que el cine coreano entre a la primera.
Supongo que la diferencia de culturas hace que muchos espectadores no consigan empatizar con personajes, ya que son excesivamente teatrales para nosotros.
Cuando uno ve 'Memories Of Murder' cree que todo lo que va a hacer su director va a ser igual de bueno o mejor y no siempre pasa. De hecho, no ocurre casi nunca.
Es la cuarta película que veo de Bong Joon-ho y sigo pensando que es un buenísimo cineasta, aunque esta me parezca un pelín tramposa y que tenga algunas secuencias poco creíbles.
La fotografía, la música y sobre todo el montaje, hacen muy recomendable la visión de esta película.