Añadir a mi grupo de amigos/usuarios favoritos
Puedes añadirle por nombre de usuario o por email (si él/ella ha accedido a ser encontrado por correo)
También puedes añadir usuarios favoritos desde su perfil o desde sus críticas
Nombre de grupo
Crear nuevo grupo
Crear nuevo grupo
Modificar información del grupo
Aviso
Aviso
Aviso
Aviso
El siguiente(s) usuario(s):
Group actions
You must be a loged user to know your affinity with ninoluna
- Recomendaciones
- Estadísticas
- Sus votaciones a categorías
- Críticas favoritas elegidas por ninoluna
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de ninoluna:
9
8,5
14.509
Drama
Un samurái pide permiso para practicarse el Seppuku (o Harakiri), ceremonia durante la cual se quitará la vida abriéndose el estómago al tiempo que otro samurái lo decapitará. Solicita también poder contar la historia que le ha llevado a tomar tan trágica decisión. (FILMAFFINITY)
22 de mayo de 2016
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando ves una nota media tan alta no hace falta decir que encontrarás un guion excepcional, una fotografía encomiable y unas actuaciones que conectan con la patata.
Así que, como no voy a alabar las tomas magnéticas, como cuando vemos al protagonista enmarcado en un fondo de puntas de lanza, ni voy a ensalzar la potente interpretación de los actores, más si cabe en una historia que parte del suicidio ritual, quiero mencionar un poco el guion.
Conocer la tradición del Japón feudal puede aportar mucho para entender algunas escenas o actitudes, pero no es indispensable. La acción y los personajes lo dicen todo. Nos encontramos en esa época en la que los samuráis ya apenas son necesarios debido a la ausencia de guerras civiles y es difícil no conectar con su miseria desde la perspectiva de la crisis que muchos de nosotros vivimos desde hace unos años.
Pero para un occidental resulta más complejo conectar con el concepto de honor y, para mí, es otro de los puntos fuertes de esta historia. En un país fuertemente militarizado, con un sector de la población tan importante como el samurái, una vez quedan miles de ellos diseminados sin nada que hacer con sus habilidades, entra en juego una crisis mayor que la económica. Asistimos a la caída en desgracia de este estamento y la única herramienta que puede ayudar a controlarlos es mediante la religión del honor y el fanatismo derivado de este.
Esta película trata de forma muy interesante algunos de estos conceptos, como la crisis en varios estados: económica, moral, existencial...; también la cultura del honor, y de los conflictos que aparecen cuando resulta difícil subsistir; por último la hipocresía, la importancia de las apariencias, y más ligado a esas reglas de honor.
Una película que remueve, que te hace pensar, que tiene una corriente de filosofía fluyendo por toda la trama, y que hasta tiene algún espadazo. Con espadazos todo es mejor.
Para los amantes del buen cine, abrid bien los ojos y disfrutad. Sacad cuchillo y tenedor para devorarla; pero cuidado con el cuchillo, no vaya a ser de bambú.
Así que, como no voy a alabar las tomas magnéticas, como cuando vemos al protagonista enmarcado en un fondo de puntas de lanza, ni voy a ensalzar la potente interpretación de los actores, más si cabe en una historia que parte del suicidio ritual, quiero mencionar un poco el guion.
Conocer la tradición del Japón feudal puede aportar mucho para entender algunas escenas o actitudes, pero no es indispensable. La acción y los personajes lo dicen todo. Nos encontramos en esa época en la que los samuráis ya apenas son necesarios debido a la ausencia de guerras civiles y es difícil no conectar con su miseria desde la perspectiva de la crisis que muchos de nosotros vivimos desde hace unos años.
Pero para un occidental resulta más complejo conectar con el concepto de honor y, para mí, es otro de los puntos fuertes de esta historia. En un país fuertemente militarizado, con un sector de la población tan importante como el samurái, una vez quedan miles de ellos diseminados sin nada que hacer con sus habilidades, entra en juego una crisis mayor que la económica. Asistimos a la caída en desgracia de este estamento y la única herramienta que puede ayudar a controlarlos es mediante la religión del honor y el fanatismo derivado de este.
Esta película trata de forma muy interesante algunos de estos conceptos, como la crisis en varios estados: económica, moral, existencial...; también la cultura del honor, y de los conflictos que aparecen cuando resulta difícil subsistir; por último la hipocresía, la importancia de las apariencias, y más ligado a esas reglas de honor.
Una película que remueve, que te hace pensar, que tiene una corriente de filosofía fluyendo por toda la trama, y que hasta tiene algún espadazo. Con espadazos todo es mejor.
Para los amantes del buen cine, abrid bien los ojos y disfrutad. Sacad cuchillo y tenedor para devorarla; pero cuidado con el cuchillo, no vaya a ser de bambú.