Pues eso, la peli es un latazo, escenas interminables, trama escasísima, que da vueltas y vueltas siempre sobre la situación de los 3 personajes. Se hace larguísima pues son 160 minutos en los que no pasa casi nada.
Tarantino se recurre en exceso a sus típicos artificios de pies, culos, pelos en los sobacos y tías buenas por doquier, que en otras pelis le dieron resultado porque había una gran historia, pero en ésta hartan y no justifican nada.
Estructura deslabazada, sin atractivo, que en un principio te mantiene a la espera ya que confías en Quentin, pero que acaba hartándote de esperar. Decepción total esta vez.

Lo bueno:
Brad Pitt y Leonardo Di Caprio, sin ellos la película sería un auténtico bodrio.
Gran cinematografía, como siempre Tarantino
Gran música y ambientación
Excelentes 10 minutos finales, con un particular LATAZO de comida de perro en la cara de la asesina.