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Voto de Manospondylus:
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Serie de TV. Animación. Fantástico. Aventuras
Serie de TV (2018-2020). 2 temporadas. 18 episodios. Cuenta las aventuras de Rubius a través de los mundos de juego para liberar a los 100 mejores gamers atrapados en un mundo virtual por Trollmask, el vengativo Master of the Game Worlds, que quiere acabar con todos ellos. En ese viaje no estará solo, la guerrera Sakura, la alocada zombie Zombirella, el espectro ancestral Slimmer y la inteligencia artificial G4t serán sus aliados en la ... [+]
19 de octubre de 2018
61 de 79 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mucho se ha hablado del que iba a ser "el primer anime español" porque, por lo visto, nadie se acuerda de Gisaku (lo que es perfectamente comprensible teniendo en cuenta que no fue más que un soporífero anuncio turístico de España estrenado doce años antes). Pero, una vez más, llamar a esto anime es un insulto a la inteligencia.
Lo correcto sería definir este subproducto como una jugada para aprovechar el tirón comercial de El Rubius, satisfaciendo de paso su egolatría y sus ansias de notoriedad al convertirlo en protagonista de una historia isekai genérica, amalgama y mala copia de varias series anime de éxito, principalmente shōnen. Y a decir verdad, nada de esto me importaría demasiado, siempre que el resultado fuera satisfactorio, pero Virtual Hero es un desastre a todos los niveles.
En primer lugar, la animación es, sin paliativos, un espanto. Mucho más próxima a Marathon o a animaciones italianas como Gormiti y Winx Club que al anime japonés, los movimientos de los personajes son torpes, espasmódicos y muy poco naturales, como si faltaran frames. Una completa chapuza que parece el producto de intentar imitar las antiguas animaciones soviéticas usando Adobe Animate. El resultado son unas escenas de acción ridículas que habrían parecido flojas incluso hace 20 años. El dibujo, a decir verdad, no está tan mal, dejando a un lado errores tan absurdos como que El Rubius esté empuñando su espada cambiante mientras en un primer plano aparece la espada aún envainada en su espalda; y el color es bueno. Volviendo al asunto de su, ejem, "inspiración" en el anime japonés, no es que Virtual Hero esté lejos del nivel de estudios como Kyoto Animation, Madhouse, Production I.G, Shaft, Bones o J.C.Staff (a los que no se aproxima ni por accidente), es que no es ni la sombra de lo que suele hacer Toei.
Luego está el doblaje. Sorprendentemente, Virtual Hero cuenta con algunos de los mejores actores y actrices de voz de España (Sergio Zamora, Graciela Molina, Nuria Trifol, Juan Carlos Gustems, Joël Mulachs, Masumi Mutsuda...) que hacen un trabajo bastante bueno sin excepciones, lo que desentona con la apariencia amateur de la animación y del guion. De hecho, el doblaje parece estar más cuidado en cuanto a reparto e interpretaciones que lo que solemos encontrar en los doblajes españoles de anime donde se han destrozado series y películas sin piedad (aún me indigna pensar en los desastres que ha hecho Selecta Visión, principalmente Madoka Magica), con dos importantes excepciones: El Rubius, que da voz al protagonista (o sea, él mismo) en la que sin duda es la peor interpretación que he oído en un doblaje español (y me he tragado algún fandub) y el que hace de su compañero de piso (sea quien puñetas sea, que ni lo sé ni me importa) que, sin llegar hasta ese extremo, también es bastante malo.
Por último está el guion, y lo he dejado para el final porque está claro que para quienes hicieron esto era lo menos importante. De hecho, todos los fallos anteriormente expuestos serían perdonables si la trama fuera original, con unos personajes sólidos y un humor ingenioso. Nada más lejos de la realidad.
Lo del protagonista geek estereotipado que queda atrapado en otro mundo es una premisa muy explotada en el manganime (género isekai), junto a una trama que sigue la previsible evolución de dicho personaje y su transformación en un héroe igual de estereotipado a medida que avanza en su camino de regreso a casa. En Virtual Hero, El Rubius va pasando por distintos mundos con temáticas variadas (efectivamente, igual a Sucker Punch): MMORPG de fantasía medieval, survival horror de zombis, plataformas tipo Donkey Kong, sandbox tipo Minecraft... y sigue así la cosa. Una pena que no se pasen también por Pandora. Habría estado bien ver a Jack el Guapo enseñándole a El Rubius la diferencia entre ahogar y estrangular.
La historia es tan simplona y está tan cargada de clichés que parece el sueño de un niñato gamer inmaduro y de vida aburrida, y además existe únicamente con el propósito de alimentar el ego de El Rubius real: él es el centro de toda la trama, héroe y elegido, aunque anda por ahí haciendo el capullo, de alguna forma todo le sale siempre bien, todas las chicas van detrás de él, todos los chicos lo envidian, recibe la ayuda de un ser misterioso, e incluso aparece su pene a tamaño de kaijū (no es coña, eso pasa en la copia de Minecraft).
A estas alturas, cualquiera se habrá dado cuenta de que Virtual Hero en lugar de estar llena de guiños e easter eggs es en realidad una quimera, un monstruo de Frankenstein de series, videojuegos, películas y otros elementos de la cultura pop mezclados sin gracia ni sentido, falta de cualquier originalidad y con El Rubius como único pegamento. Pero no sólo no es original, sino que también está mal construida en general. La trama es simple como pocas y aún así hay detalles que quedan poco claros. Por ejemplo, los motivos que le llevan a meterse en un mundo u otro y por qué a veces parecen estar atrapados en uno de esos mundos pero siempre lo abandonan sin problemas, o entran y salen de otros como quieren. Y las motivaciones de los personajes son dudosas cuando menos (seguir ciegamente y servir a El Rubius por algún motivo inexplicado).
Los diálogos son atroces, sin gracia ni naturalidad, con comentarios que parecen completamente fuera de lugar. Y no me refiero a que los chistes estén metidos a la fuerza, que también, sino a que casi todo lo que dice El Rubius no aporta absolutamente nada. Y ya que estamos, ¿por qué demonios no hay silencios? Desde la filmografía de Ghibli hasta Naruto, pasando por Akira, Ghost in the Shell, Your Name, Perfect Blue, Utena, Evangelion, Cowboy Bebop o el típico slice of life iyashikei con subtexto yuri y un montón de fanservice que sacan cada primavera, en el anime los silencios (acompañados de una música incidental que acostumbra a ser notable) son siempre importantes, pero aquí no se calla nadie. Jamás.
(Continúa sin spoilers)
Lo correcto sería definir este subproducto como una jugada para aprovechar el tirón comercial de El Rubius, satisfaciendo de paso su egolatría y sus ansias de notoriedad al convertirlo en protagonista de una historia isekai genérica, amalgama y mala copia de varias series anime de éxito, principalmente shōnen. Y a decir verdad, nada de esto me importaría demasiado, siempre que el resultado fuera satisfactorio, pero Virtual Hero es un desastre a todos los niveles.
En primer lugar, la animación es, sin paliativos, un espanto. Mucho más próxima a Marathon o a animaciones italianas como Gormiti y Winx Club que al anime japonés, los movimientos de los personajes son torpes, espasmódicos y muy poco naturales, como si faltaran frames. Una completa chapuza que parece el producto de intentar imitar las antiguas animaciones soviéticas usando Adobe Animate. El resultado son unas escenas de acción ridículas que habrían parecido flojas incluso hace 20 años. El dibujo, a decir verdad, no está tan mal, dejando a un lado errores tan absurdos como que El Rubius esté empuñando su espada cambiante mientras en un primer plano aparece la espada aún envainada en su espalda; y el color es bueno. Volviendo al asunto de su, ejem, "inspiración" en el anime japonés, no es que Virtual Hero esté lejos del nivel de estudios como Kyoto Animation, Madhouse, Production I.G, Shaft, Bones o J.C.Staff (a los que no se aproxima ni por accidente), es que no es ni la sombra de lo que suele hacer Toei.
Luego está el doblaje. Sorprendentemente, Virtual Hero cuenta con algunos de los mejores actores y actrices de voz de España (Sergio Zamora, Graciela Molina, Nuria Trifol, Juan Carlos Gustems, Joël Mulachs, Masumi Mutsuda...) que hacen un trabajo bastante bueno sin excepciones, lo que desentona con la apariencia amateur de la animación y del guion. De hecho, el doblaje parece estar más cuidado en cuanto a reparto e interpretaciones que lo que solemos encontrar en los doblajes españoles de anime donde se han destrozado series y películas sin piedad (aún me indigna pensar en los desastres que ha hecho Selecta Visión, principalmente Madoka Magica), con dos importantes excepciones: El Rubius, que da voz al protagonista (o sea, él mismo) en la que sin duda es la peor interpretación que he oído en un doblaje español (y me he tragado algún fandub) y el que hace de su compañero de piso (sea quien puñetas sea, que ni lo sé ni me importa) que, sin llegar hasta ese extremo, también es bastante malo.
Por último está el guion, y lo he dejado para el final porque está claro que para quienes hicieron esto era lo menos importante. De hecho, todos los fallos anteriormente expuestos serían perdonables si la trama fuera original, con unos personajes sólidos y un humor ingenioso. Nada más lejos de la realidad.
Lo del protagonista geek estereotipado que queda atrapado en otro mundo es una premisa muy explotada en el manganime (género isekai), junto a una trama que sigue la previsible evolución de dicho personaje y su transformación en un héroe igual de estereotipado a medida que avanza en su camino de regreso a casa. En Virtual Hero, El Rubius va pasando por distintos mundos con temáticas variadas (efectivamente, igual a Sucker Punch): MMORPG de fantasía medieval, survival horror de zombis, plataformas tipo Donkey Kong, sandbox tipo Minecraft... y sigue así la cosa. Una pena que no se pasen también por Pandora. Habría estado bien ver a Jack el Guapo enseñándole a El Rubius la diferencia entre ahogar y estrangular.
La historia es tan simplona y está tan cargada de clichés que parece el sueño de un niñato gamer inmaduro y de vida aburrida, y además existe únicamente con el propósito de alimentar el ego de El Rubius real: él es el centro de toda la trama, héroe y elegido, aunque anda por ahí haciendo el capullo, de alguna forma todo le sale siempre bien, todas las chicas van detrás de él, todos los chicos lo envidian, recibe la ayuda de un ser misterioso, e incluso aparece su pene a tamaño de kaijū (no es coña, eso pasa en la copia de Minecraft).
A estas alturas, cualquiera se habrá dado cuenta de que Virtual Hero en lugar de estar llena de guiños e easter eggs es en realidad una quimera, un monstruo de Frankenstein de series, videojuegos, películas y otros elementos de la cultura pop mezclados sin gracia ni sentido, falta de cualquier originalidad y con El Rubius como único pegamento. Pero no sólo no es original, sino que también está mal construida en general. La trama es simple como pocas y aún así hay detalles que quedan poco claros. Por ejemplo, los motivos que le llevan a meterse en un mundo u otro y por qué a veces parecen estar atrapados en uno de esos mundos pero siempre lo abandonan sin problemas, o entran y salen de otros como quieren. Y las motivaciones de los personajes son dudosas cuando menos (seguir ciegamente y servir a El Rubius por algún motivo inexplicado).
Los diálogos son atroces, sin gracia ni naturalidad, con comentarios que parecen completamente fuera de lugar. Y no me refiero a que los chistes estén metidos a la fuerza, que también, sino a que casi todo lo que dice El Rubius no aporta absolutamente nada. Y ya que estamos, ¿por qué demonios no hay silencios? Desde la filmografía de Ghibli hasta Naruto, pasando por Akira, Ghost in the Shell, Your Name, Perfect Blue, Utena, Evangelion, Cowboy Bebop o el típico slice of life iyashikei con subtexto yuri y un montón de fanservice que sacan cada primavera, en el anime los silencios (acompañados de una música incidental que acostumbra a ser notable) son siempre importantes, pero aquí no se calla nadie. Jamás.
(Continúa sin spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Basta decir que El Rubius se levanta a por comida y se pasa todo el trayecto de la silla a la puerta cantando "comida, comida, comida, la, la, laaa", por si no hemos entendido el motivo de su comportamiento aunque ya lo haya aclarado; y a partir de ahí está todo el tiempo explicando lo que estamos viendo como si fuera una pista de comentarios. Literalmente, en cada momento hay alguien hablando o escuchamos la narración de El Rubius.
Aparte de El Rubius, que se limita a hacer de protagonista de shōnen entusiasta y torpe, tenemos un grupo de héroes de los más típico: G4t0 (en leet speak, no se calentaron la cabeza), que es la mascota porque quien escribiera esto cree que forzosamente tiene que haber una; Sakura (vaya, qué nombre más original), quien por algún motivo parece saberlo todo, pero en realidad no es más que el típico arquetipo de guerrera sexualizada que sirve de interés romántico para el prota y que, aunque parezca una luchadora fuerte, es atrapada fácilmente (cautiverio que incluye una desafortunada escena con tentáculos estilo hentai) y necesita ser rescatada; Slimmer (¿no es obvio que está delgado?), una copia de Slenderman en la forma de un NPC que se comporta como el prescindible mayordomo de El Rubius; Zombirella (sospecho que el nombre es un homenaje Vampirella, famoso personaje hipersexualizado de cómic), cuyo diseño es digno de Monster High y que siente una adoración obsesiva por El Rubius... bueno, como prácticamente todos los demás personajes con la excepción de Trollmask que sólo lo envidia. Este último es el malo, una versión histriónica y disfuncional de Digimon Emperador que bien podría llamarse Villano Caricaturesco Promedio. Cabe destacar que El Rubius es incapaz de decir correctamente su nombre en lo que se supone que es un gag recurrente. Por supuesto, no tiene maldita la gracia.
Como puede intuirse, sí, lamentablemente esta serie va bien servida de intentos de fanservice y estereotipos machistas (las connotaciones que acompañan al término "waifu" son patéticas y, a menudo, repugnantes; sí, como ocurre con "husbando", aunque aquí no encontramos este caso), claro que los personajes están mal escritos independientemente de su sexo.
El humor (presumiblemente el punto fuerte de esta serie) no es que sea precisamente elaborado. En el minuto 7 del primer episodio ya tenemos el primer chiste de pedos. Por supuesto, tampoco hace ninguna gracia. A veces, Virtual Hero parece que pretende ser una parodia, pero para eso le falta mucho ingenio. Por otra parte, El Rubius cargándose a sus enemigos a pollazos... ¿es un chiste, una declaración de intenciones, una metáfora, una apuesta, una fantasía sexual o qué coño es?
Resumiendo, coge Sword Art Online y añádele toques de Fairy Tail, Yo-Kai Watch, Dragon Ball, One Piece, Tsubasa: Reservoir Chronicle, Bobobo, Digimon y Doreamon, mete una mezcla imprecisa de elementos de videojuegos, mundos temáticos típicos y movidas varias de internet, añade a El Rubius de prota Marty Stu en la que quizá sea la peor interpretación en un doblaje español y anímalo con el estilo de las series de animación italianas y francesas de hace 15 años. Esa es la receta de Movistar+ para hacer un anime, aunque a mí me suena más a la receta del desastre. Volviendo al tema de Gisaku, esta fue definida por la SEEI (productora de la película) como "una manera de vender la imagen de nuestro país". Pues Virtual Hero no es más que una manera de vender la imagen de El Rubius. Quizá logre contentar a sus incondicionales (entre quienes, por lo visto, supongo que no estoy) y divierta a algún niño nada exigente. El resto de la población que huya de este intento fallido de anime como del virus del Ébola. No merece la pena verlo ni por la curiosidad que pueda despertar.
Aspectos positivos: Parte del doblaje, parte del soundtrack... no sé, el coloreado y... supongo que eso es todo.
Aspectos negativos: Absolutamente todo lo demás.
Puntuación: 1
Aparte de El Rubius, que se limita a hacer de protagonista de shōnen entusiasta y torpe, tenemos un grupo de héroes de los más típico: G4t0 (en leet speak, no se calentaron la cabeza), que es la mascota porque quien escribiera esto cree que forzosamente tiene que haber una; Sakura (vaya, qué nombre más original), quien por algún motivo parece saberlo todo, pero en realidad no es más que el típico arquetipo de guerrera sexualizada que sirve de interés romántico para el prota y que, aunque parezca una luchadora fuerte, es atrapada fácilmente (cautiverio que incluye una desafortunada escena con tentáculos estilo hentai) y necesita ser rescatada; Slimmer (¿no es obvio que está delgado?), una copia de Slenderman en la forma de un NPC que se comporta como el prescindible mayordomo de El Rubius; Zombirella (sospecho que el nombre es un homenaje Vampirella, famoso personaje hipersexualizado de cómic), cuyo diseño es digno de Monster High y que siente una adoración obsesiva por El Rubius... bueno, como prácticamente todos los demás personajes con la excepción de Trollmask que sólo lo envidia. Este último es el malo, una versión histriónica y disfuncional de Digimon Emperador que bien podría llamarse Villano Caricaturesco Promedio. Cabe destacar que El Rubius es incapaz de decir correctamente su nombre en lo que se supone que es un gag recurrente. Por supuesto, no tiene maldita la gracia.
Como puede intuirse, sí, lamentablemente esta serie va bien servida de intentos de fanservice y estereotipos machistas (las connotaciones que acompañan al término "waifu" son patéticas y, a menudo, repugnantes; sí, como ocurre con "husbando", aunque aquí no encontramos este caso), claro que los personajes están mal escritos independientemente de su sexo.
El humor (presumiblemente el punto fuerte de esta serie) no es que sea precisamente elaborado. En el minuto 7 del primer episodio ya tenemos el primer chiste de pedos. Por supuesto, tampoco hace ninguna gracia. A veces, Virtual Hero parece que pretende ser una parodia, pero para eso le falta mucho ingenio. Por otra parte, El Rubius cargándose a sus enemigos a pollazos... ¿es un chiste, una declaración de intenciones, una metáfora, una apuesta, una fantasía sexual o qué coño es?
Resumiendo, coge Sword Art Online y añádele toques de Fairy Tail, Yo-Kai Watch, Dragon Ball, One Piece, Tsubasa: Reservoir Chronicle, Bobobo, Digimon y Doreamon, mete una mezcla imprecisa de elementos de videojuegos, mundos temáticos típicos y movidas varias de internet, añade a El Rubius de prota Marty Stu en la que quizá sea la peor interpretación en un doblaje español y anímalo con el estilo de las series de animación italianas y francesas de hace 15 años. Esa es la receta de Movistar+ para hacer un anime, aunque a mí me suena más a la receta del desastre. Volviendo al tema de Gisaku, esta fue definida por la SEEI (productora de la película) como "una manera de vender la imagen de nuestro país". Pues Virtual Hero no es más que una manera de vender la imagen de El Rubius. Quizá logre contentar a sus incondicionales (entre quienes, por lo visto, supongo que no estoy) y divierta a algún niño nada exigente. El resto de la población que huya de este intento fallido de anime como del virus del Ébola. No merece la pena verlo ni por la curiosidad que pueda despertar.
Aspectos positivos: Parte del doblaje, parte del soundtrack... no sé, el coloreado y... supongo que eso es todo.
Aspectos negativos: Absolutamente todo lo demás.
Puntuación: 1