Casi tres horas de película, escuchando atentamente conversaciones magnificas, bien hiladas, conversaciones de reproches, ilusiones y desengaños de una pareja, sin perder detalle, me he sentido como la vieja del visillo , en esos primeros planos en que Marian miraba fijamente, estaba tentada de bajar la mirada y hacer ver como que miraba a otra parte.

Nunca había visto ninguna película que contase y explicase diferentes situaciones de una pareja y los entresijos del amor de este modo, doloroso muchas veces, triste, desesperante, sin ñoñez ninguna y con una crudeza brutal.

Mi reflexión es que esta sociedad nos da una pautas a seguir incluso en el modo en que debemos amar y compartir la vida con la persona amada, encorsetandolo todo y haciendo complicado que no llegue el tedio, pero cuando dejas y le das rienda suelta a los sentimientos, sin que importe que piensen tus vecinos, amigos, familia y el mundo que te rodea, el sentimiento fluye de otro modo y es mas simple saber que quieres y cuanto quieres y es mas fácil ser sincero con uno mismo.

En esta película veo perfectamente en muchos momentos lo cerca que están esos dos sentimientos en teoría contrapuestos, ya lo decía mi abuela del AMOR al ODIO hay un paso ...