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Voto de Taffeta:
3
6,8
41.390
Thriller. Acción. Comedia
Un veterano agente secreto inglés (Colin Firth) debe entrenar a un joven sin refinar (Taron Egerton), pero que promete convertirse en un competitivo agente gracias a un ultra-programa de entrenamiento, al mismo tiempo que una amenaza global emerge procedente de un genio retorcido. Adaptación del cómic de Mark Millar y Dave Gibbons. (FILMAFFINITY)
21 de octubre de 2016
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta es la tercera película que veo de Matthew Vaughn tras Stardust y Kick-Ass, y por lo que me he dado cuenta al tipo éste le gustan las películas con un tono paródico, o increíblemente violento, o los dos. Mientras que Kick-Ass me parece una película buenísima donde sólo fallaba el protagonista, que era más fome que chupar un clavo, Stardust me parece una irritante estupidez, un circo plagado de tonterías donde lo único destacable es la magnífica Michelle Pfeiffer, que intentaba con su gran talento arreglar la embarrada, aunque no le alcanzaba.
Pero con esto...con esto Matthew se ha superado, Kingsman es peor que Stardust. Es aún más ridícula, mal actuada, mal dirigida, y además con violencia gratuita, totalmente carente de gracia.
Si tiene esta altísima reputación es por el nombre de su director, porque si la hubiera dirigido un don nadie como por ejemplo McG (en más de una escena este filme me hizo acordarme de los Ángeles de Charlie) le hubiera llovido la mierda. Todo es estúpido, pueril, bochornoso, con actores que dan vergüenza ajena (¿Cuanto le habrán pagado a Colin Firth por meterse en esto?). Hasta las películas de los 90, con lo locas y absurdas que eran tienen más dignidad.
No todo lo que brilla es oro, no todas las películas violentas son geniales, y no todo lo que hace Matthew Vaughn es una maravilla.
Pero con esto...con esto Matthew se ha superado, Kingsman es peor que Stardust. Es aún más ridícula, mal actuada, mal dirigida, y además con violencia gratuita, totalmente carente de gracia.
Si tiene esta altísima reputación es por el nombre de su director, porque si la hubiera dirigido un don nadie como por ejemplo McG (en más de una escena este filme me hizo acordarme de los Ángeles de Charlie) le hubiera llovido la mierda. Todo es estúpido, pueril, bochornoso, con actores que dan vergüenza ajena (¿Cuanto le habrán pagado a Colin Firth por meterse en esto?). Hasta las películas de los 90, con lo locas y absurdas que eran tienen más dignidad.
No todo lo que brilla es oro, no todas las películas violentas son geniales, y no todo lo que hace Matthew Vaughn es una maravilla.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
La cacareada escena de la iglesia, que censuraron acá en Latinoamérica, no es nada del otro mundo. Palidece ante las peleas de Ong Bak o las brutales matanzas de Dredd.
Como no tiene tanta imaginación, Vaughn repite el villano de Kick-Ass: malo infantil con look ridículo y que cecea, mientras que ahí el malo era joven y causaba gracia, aquí Samuel L. Jackson lo hace insoportable, gritón y sobreactuado a más no poder.
La mala con cuchillas en vez de piernas ¿tenía alguna gracia?
Y lo más aberrante, estúpido e imperdonable ¿A quien se le ocurrió que las cabezas que explotan en challas de colores era una buena idea? Tank Girl tiene una reputación de mierda viendo que ninguna de sus ocurrencias están tan recargadas de imbecilidad como ésta.
Como no tiene tanta imaginación, Vaughn repite el villano de Kick-Ass: malo infantil con look ridículo y que cecea, mientras que ahí el malo era joven y causaba gracia, aquí Samuel L. Jackson lo hace insoportable, gritón y sobreactuado a más no poder.
La mala con cuchillas en vez de piernas ¿tenía alguna gracia?
Y lo más aberrante, estúpido e imperdonable ¿A quien se le ocurrió que las cabezas que explotan en challas de colores era una buena idea? Tank Girl tiene una reputación de mierda viendo que ninguna de sus ocurrencias están tan recargadas de imbecilidad como ésta.