Cito las palabras del crítico Juan Sangrós en ZNcine :
"...la sensación de agobio que el film busca infructuosamente con ahínco durante noventa minutos queda anulada en el momento en que Sandra Bullock queda como única protagonista de la película. En otras palabras: el nulo reparto del peso de la actuación repercute en una narración que se torna predecible bajo los cánones del cine comercial americano, donde el final feliz es un imperativo. Si a eso le sumamos que Sandra Bullock no está en condiciones de aguantar una película prácticamente sola, dadas sus extremadamente minadas capacidades interpretativas, y que George Clooney desaparece de la plantilla más de la mitad de la película…". Fin de la cita.
Pues yo tambien voy como este señor a contracorriente y aunque reconozco el esfuerzo enorme que habrá sido físicamente e interpretativamente llevar el peso de semejante epopeya espacial, Bullock es mejor actriz de comedia (recientemente la he visto en The Heat, y me ha encantado) que una actriz de drama y no consigue transmitir sus demonios y sentimientos internos de una manera que cale en el espectador. Su registro de calidad interpretativa tiene límites naturales claros. Clooney se la come en pantalla cuando están juntos y ni sal le hace falta echarle... es un crack auténtico con su humor y chispa exclusivos.
El rollo sentimentaloide de la muerte de la niña de Bullock, es un recurso fácil, para tener a la protagonista en un on/off, y que el espectador sufra con su lucha y disfrute con su resucitación, y no es que la idea sea mala en sí, pero es algo muy tópico y requería otro tipo de plasmación de mejor sutileza, y hasta a otra actriz con mayores dotes profesionales; ahí, Cuarón, se te fue la pinza... igual que esos primeros planos a objetos sagrados de rusos y chinos, sin matices, algo que resulta más bien vergonzoso como otro recurso fácil; o la imagen congelada en un minuto lo menos, de Bullock en posesión fetal, después de quitarse el traje tras otra hazaña de supervivencia... No, Sr Quarón, en sutilezas usted, es un pato muy torpe, ni es Kubrick, ni es Riddly Scott, y por todo esto nunca pondría un sobresaliente al film.
Son los veinte minutos finales (magníficos, por cierto), los que Bullock mejor cumple bien con su papel, cuando ya ha superado sus traumas de mujer sensible y aterrorizada y se convierte en una decidida, optimista y sonriente luchadora. Sí, es un final comercial en un film comercial que coquetea con simbolismos sutiles para parecer más de autor, pero así y todo, es tan magnífico su apartado técnico en todos sus aspectos, que ni la Bullock consigue desmontar un edificio construído con gran inspiración y profesionalidad.
Su imagen arrastrandose por el barro, tras tocar lo más alto del cielo, hasta lo profundo del mar, y luego consiguiendo ponerse en pie sobre el terreno fangoso para llegar a tierra firme, es un final que me ha parecido muy inspirado y un excelente remate a la ilustración de lo que significa ser un superviviente de la vida, un luchador, y un triunfador sobre la vida y todos los problemas que conlleva, sus horrores y sus maravillas. No se les ocurra perderse Gravity en cine y 3d, así sí vale la pena trasladarse a la sala oscura de los sueños y pagar con gusto una entrada. Gracias, Cuarón.