pueril, es increíble como una historia que podría haber dado tanto juego queda reducido al más absoluto aburrimiento debido a una forma de narrar completamente pormenorizada donde todo, absolutamente todo, lo que acaece en la película nos es explicado como si el espectador tuviera alguna discapacidad mental.
Y no valen argumentaciones en contra diciendo que es una película antigua y que en esa época había que exponerlo todo de una manera más simple (corría el año 56 y para entonces se habían estrenado una buena cantidad de obras maestras muchísimo más arriesgadas narrativamente y formalmente ¿hacen falta ejemplos?)...
Pero no solo esos problemas ha de intentar solventar ésta película interpretaciones tan exageradas que caen en el ridículo, una puesta en escena que en otras manos hubiera sido desasosegante y un ritmo (debido al tono explicativo del filme) que lastra la narración de manera irremediable.
Sinceramente con éste mismo argumento (o uno muy parecido) recomiendo ver “The Other” (El Otro) de Robert Mulligan mucho mas arriesgada, convincente y aterradora...
Es una pena porque la idea no era mala.....