No sé cuantas veces habré repetido que las películas de perros me encantan aunque algunas más que otras. Esta cinta no es un peliculón ni una película imprescindible pero son 79 minutos muy entretenidos con escenas graciosas y algunos dialogos graciosos como las frases del gato latino o la presentación de la familia de Marmaduke. El guión no es nada del otro mundo y la historia del niño marginado y la adolescente que se quiere lugar al chico guapo las tenemos muy vistas, como por ejemplo en Beethoven o Dr. Dolittle. Pero, ¿Cuantas fiestas de perros hemos visto en pantalla grande? Muy pocas. Cuando la vi en el cine fue en la época del mundial de 2010 cuando la taquilla estaba en su peor momento pero que esta fue una de las sorpresas inesperadas en la taquilla española ya que estuvo en el nº1 durante dos semanas y he de reconocer que yo también participé en ese éxito veraniego únicamente en España porque no fue un taquillazo a nivel doméstico y global. Los actores son desconocidos y están sobreactuados pero William H. Macy en sí no lo hace nada mal aunque no al nivel de otras. En fín, entretenido pasatiempo para niños que no tiene mucho que mostrar pero pasas un rato agradable