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Voto de EuTheRocker:
9
Thriller. Drama Biopic sobre el matemático británico Alan Turing, famoso por haber descifrado los códigos secretos nazis contenidos en la máquina Enigma, lo cual determinó el devenir de la II Guerra Mundial (1939-1945) en favor de los Aliados. Lejos de ser admirado como un héroe, Turing fue acusado y juzgado por su condición de homosexual en 1952. (FILMAFFINITY)
5 de enero de 2015
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Respeto. Eso es lo que se desprende de las grandes producciones que nos llegan desde el Reino Unido. Manejando presupuestos mucho más modestos que los que pueden permitirse al otro lado del charco, en la llamada meca del cine, los británicos juegan con el respeto a su favor. Pero no se trata de un respeto hacia el material, los personajes, la producción o el montaje. Su trabajo va más allá. A un punto olvidado por muchos vendedores de humo que dejaron en el tintero del talento uno de los ingredientes más importantes del séptimo arte, y que los ingleses manejan con delicada sutileza: el respeto por el espectador. De esta manera, es constante la llegada a la pequeña o gran pantalla joyas desde el otro lado del Canal de la Mancha, que se caracterizan por el mimo y la calidad de su contenido, ofreciendo un producto completo y perfectamente preparado para su disfrute y gozo. Así podríamos citar maravillas como "Downton Abbey" o "Sherlock" desde el lado de la series televisivas, que además he escogido por compartir personajes con la película que nos ocupa; o esta soberbia "The Imitation Game" desde el lado del séptimo arte.

Porque la propuesta de Morten Tyldum, es un redondo mecanismo cinematográfico que rueda sobre los engranajes de su propia complejidad interna, demostrando un dominio del tiempo y el lenguaje narrativo soberbio. Jugando con los tiempos del relato, y con un pausado pero constante ritmo, se va construyendo este genial thriller dramático sustentado sobre los pilares de sus personajes. Unos personajes que giran en torno a un soberbio y desatado Benedict Cumberbatch, actor que lleva ya unos años demostrando su talento en diferentes géneros, y que por fin nos ofrece uno de esos papeles donde se destapa completamente con una interpretación magnífica donde construye un muro hacia el exterior, a través de su presencia física, dejando al espectador en el interior de sus fronteras por la profundidad emocional de su personaje. Un juego que funciona a las mil maravillas como la desencriptación de los temores de un protagonista modélico en su concepción y desarrollo. El Alan Turing de Cumberbatch es un faro capaz de guiar al resto del reparto por el sendero de los sentimientos. De esa manera, Keira Knightley, arrebata suspiros con su presencia en pantalla, Matthew Goode deleita con la intensidad de su mirada, o Mark Strong juega con el espectador y su manejo de la incertidumbre. Aunque sólo son algunos nombres propios de un reparto que brilla por sí solo, y que se muestra tan redondo, que se echa en falta la resolución más detallada de algunas tramas secundarias que sin trascender al núcleo central del relato, resultan tan apetecibles que dejan un apetito voraz por disfrutar más de la cinta.

Una cinta que además, tiene esa seriedad británica al servicio de una ambientación soberbia. Con una banda sonora que demuestra porque Alexandre Desplat es uno de los mejores compositores de la actualidad cinematográfica. Y con un guión que es un perfecto mecanismo de relojería que no se detiene, ni juega con la inteligencia del público, ni pretende ser más que un puzzle de emociones escondidas disfrazadas de relato de espionaje. Un entramado manejado a la perfección por Morten Tyldum, que consigue hacer de su relato una perfecta máquina que funciona a todos sus niveles, y que resulta tan correcta y soberbia, que su único defecto, si es que alguien quiere ponerle un pero a un relato maravilloso que bebe del cine clásico saboreando lo mejor del género, es la falta de riesgos, innecesarios por otra parte, para intentar salirse de su propio perfección formal. Sin embargo, gracias a esa perfección formal que va de la mano del respeto por el respetable, nos encontramos ante uno de esos títulos que se disfrutan una y mil veces por ofrecer algo más que luces y sonido.

P.D.: Excelente trabajo en el doblaje de Iván Muelas, uno de los mejores y más en forma actores de nuestro país. Como siempre, es recomendable verla en V.O. pero con trabajos de posproducción así, da gusto.
EuTheRocker
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