Empecemos diciendo que para ver esta película, tienes que estar más que concentrado. Mientras que vayáis leyendo, os enteraréis del porqué.

Un sordomurdo quiere conseguir un riñon para su hermana, ya que el no puede donarlo por ser de otro tipo sanguíneo. Acude a la mafia del mercado negro, van pasando sucesos, pim pam pum...

No hay más que decir que lo que más destaca en esta película es la fotografía y el montaje. Es totalmente diferente a lo que solemos ver hoy en día. Muy pero que muy "currado". Normalmente, el cine no profundiza en los pensamientos del sordomudo, aquí, Park Chan-wook, te pone frases en medio del film, para una mayor comprensión de la idea y de la secuencia, propiamente dicha.

Luego está la interpretación de los personajes. Un tanto coreana, por así decirlo. ¿ A que me refiero ? Cuando hayáis visto unas cuántas, sabréis lo que digo. No quiere decir que no sea buena, pero excepto los protagonistas, los demás llegan a ser muy artificiales.Y estoy hablando de la película, cuando la he visto en VOSE.

Lo peor de todo es el ritmo. Debo reconocer que la película me ha gustado mucho. Pero lo he pasado francamente mal durante la primera media hora. ¿ Por qué ? Por el director se pasa por ahí, osea, por los bajos, la introducción. Pero poco a poco te va enganchando, te va enganchando, y finalmente ves un film con muchos giros perfectos y una historia de venganza muy fetén.