Cuando empiezas a ver la película te sumerje en su historia, en sus increíbles y coloridos paisajes, los diálogos intercalados del narrador todavía hace que te sumerjas en ese mundo todavía más, pero sobre todo la inmensa belleza de Zhou Yu. Estos tres elementos intercalados hacen de la película que el tiempo que dura sea un tiempo de tu vida en el que agradeces lo que estás mirando, incluso te olvidas del guión tan complejo que te quieren enseñar, sin preocuparte de si lo entiendes o no.

No le he puesto un 10 porque no me atrevía, porque no la he visto con suficiente atención como para entender su argumento, pero cuando la vuelva ver, seguro que lo haré, y le ponga el 10 que seguro se merece. Y es que está tan bien filmada y realizada que se puede "rechazar" la finalidad del argumento con sólo el disfrute de la vista, que se agradece hasta olbidar que estás viendo una pantalla.

Lo mejor: Paisajes, diálogos y belleza y papel de la protagonista.
Lo peor: Complejidad del argumento y saltos excesivos en el tiempo, sobretodo entre historia recordativa y presente.