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Voto de Ghibliano:
3
4,0
1.265
Animación. Comedia Gracias al Pacto Vegetariano, todos los animales conviven en paz y armonía. Todos menos uno: la hiena Crevel, que vive con la angustiosa sensación de no volver a comer carne. Decidido a calmar su apetito, una noche Crevel acude al cementerio dispuesto a devorar los cadáveres, pero no puede hacerlo: ¡no hay ninguno! El león Pérsicus y su consigliere, el tigre Altaicus, han organizado toda una red alimenticia con los difuntos para ... [+]
1 de julio de 2010
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Madre del amor hermoso, pero qué es lo que acabo de ver. Os juro que me ha entrado dolor de cabeza y todo.

Y lo admito, no sabía qué esperar de "La crisis carnívora". Ni siquiera tenía la menor idea de que estaba animada en flash (feliz ignorancia), así que me he metido con ella sin más, sólo por la curiosidad.

Hasta que llegan los créditos iniciales. De repente he sentido una opresión en el estómago, una voz estridente que rondaba amenazante mi cabeza. "La has cagado. La has cagado bien cagada". Y yo, aturdido tal vez por el festín de neuronas que me acababa de pegar, he decidido ni más ni menos que... ¡seguir! ¡E incluso la he visto entera!

En fin. ¿Qué queréis que os diga de esta obra? No tiene nada. Es mala, pesada, aburrida, tonta, cargante, sin gracia... El argumento daba para mucho, eso se lo concedo a sus admiradores. Pero eso no implica que "La crisis carnívora" haya logrado sacar algo valioso de ello. Y de hecho, el resultado no es en absoluto satisfactorio.

Para empezar, está la cuestión de la animación. Es en flash, hostia pues qué original. Sí. Y también simplón y estéticamente horrendo. No hay manera de que la peli esta haga gracia a nivel visual, es tanto tiempo acostumbrado a ver este estilo en narraciones cortas que su uso en un largometraje se me hace pesadísimo. ¿Culpa mía? Puede ser. Pero hay cosas que funcionan sólo en ciertos ámbitos, ésta podría ser una de ellas.

En fin, pasando de la estética y centrándome en el contenido: el humor. Un revoltijo absurdo-gamberro-negro-ácido más simple que el mecanismo de un botijo, que algunos han valorado aquí como la apoteosis del cachondeo y a mí me ha dejado como un témpano, excepto algunos chistes un poco más conseguidos. ¿Alguien me explica la gracia en ver a un gallo chillar "¡A la guerra! ¡A la guerra!"? ¿O en esas conversaciones tipo "-Blablabla hijo de puta. -Blablabla mierda blablabla. -Blablabla que te den por el culo."? Y conste que no me importa que metan tacos con fines humorísticos, pero me jode lo de esta película porque los meten ahí con calzador en los diálogos de los personajes, como para regocijarse en su sonoridad. Se pierde la espontaneidad y se diluye el factor sorpresa. Y así no tiene gracia.

(sigo en spoiler sin revelar nada)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ghibliano
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