Media votos
6,7
Votos
6.363
Críticas
336
Listas
421
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Ghibliano:
3
4,4
21.706
Fantástico. Aventuras. Acción
En un mítico bosque de la región de Alagaësia, el joven granjero Eragon (Edward Speleers) descubre una preciosa y rara piedra azul. Para que su familia pueda pasar el duro invierno, el muchacho decide cambiarla por alimentos, pero descubre asombrado cómo un dragón sale de lo que parecía una piedra pero, en realidad, era un huevo. (FILMAFFINITY)
28 de marzo de 2010
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tal vez sea conveniente aclarar desde un principio que no he leído el libro en el que se basa esta película, y que no sé hasta qué punto la empanada monumental que se muestra aquí es culpa íntegra de los guionistas. Lo que sí sé es que se me han quitado de repente las ganas de saber más sobre esta saga, y que por mí pueden enterrar toda la obra de Paolini y sus adaptaciones cinematográficas para que no vuelvan a ver la luz del día. ¿Estoy siendo injusto? Los fans dirán. En todo caso no me culpéis a mí, culpad a Stefen Fangmeier, que macho, o es más torpe que un arado o es un espía de la competencia. ¡Menudo elemento te has buscado, Paolini!
Los errores en la construcción de personajes son de órdago. Acepto hasta cierto punto los defectos de continuidad y las caracterizaciones simplificadas o alejadas de la realidad; al fin y al cabo estos fallos suelen darse muy a menudo en este tipo de cine y no afectan al entretenimiento ni suelen suponer un lastre. Pero lo de Eragon ya es otra historia... nunca había visto tantos personajes absolutamente INNECESARIOS robando tiempo en tramas que no conducen a NADA. Joder, "El señor de los anillos" también tiene algunas subtramas de las que podría prescindir, pero eso es más anecdótico que otra cosa. Aquí bien podríamos eliminar a la elfa, el hermano de Eragon o al misterioso individuo que le salva y no pasaría nada, el argumento sobreviviría sin ellos tan de puta madre como ahora.
Por no hablar de las caracterizaciones. Tópicos, tópicos, tópicos, tópicos y más tópicos. Ya no digo que hagan algo realmente innovador, pero podrían mostrar algo de originalidad.
Los diálogos no son grandilocuentes, son estúpidos. La única frase que vale la pena de toda la película ("Una parte de coraje, tres de estupidez") se la cargan al repetirla en otras dos ocasiones sin venir a cuento, y el resto es un desfile de paridas tontísimas. No veo el "tono épico" ahí, por ningún lado.
Y no hablemos de las actuaciones, porque menudo es Edward Speelers. Me revienta muchísimo ver cómo alguien puede no sólo ser todo un genio de la inexpresividad y pasarse el metraje entero haciendo caras de nada, sino además fracasar estrepitosamente en cada ocasión que intenta esbozar un gesto para realzar la emoción de una escena. Coño, parece que lo haga aposta. Hay una escena en la que enseña a Saphira a volar y el tío prueba con todo tipo de caras y no acierta ni una. Lo dicho, un genio.
Los errores en la construcción de personajes son de órdago. Acepto hasta cierto punto los defectos de continuidad y las caracterizaciones simplificadas o alejadas de la realidad; al fin y al cabo estos fallos suelen darse muy a menudo en este tipo de cine y no afectan al entretenimiento ni suelen suponer un lastre. Pero lo de Eragon ya es otra historia... nunca había visto tantos personajes absolutamente INNECESARIOS robando tiempo en tramas que no conducen a NADA. Joder, "El señor de los anillos" también tiene algunas subtramas de las que podría prescindir, pero eso es más anecdótico que otra cosa. Aquí bien podríamos eliminar a la elfa, el hermano de Eragon o al misterioso individuo que le salva y no pasaría nada, el argumento sobreviviría sin ellos tan de puta madre como ahora.
Por no hablar de las caracterizaciones. Tópicos, tópicos, tópicos, tópicos y más tópicos. Ya no digo que hagan algo realmente innovador, pero podrían mostrar algo de originalidad.
Los diálogos no son grandilocuentes, son estúpidos. La única frase que vale la pena de toda la película ("Una parte de coraje, tres de estupidez") se la cargan al repetirla en otras dos ocasiones sin venir a cuento, y el resto es un desfile de paridas tontísimas. No veo el "tono épico" ahí, por ningún lado.
Y no hablemos de las actuaciones, porque menudo es Edward Speelers. Me revienta muchísimo ver cómo alguien puede no sólo ser todo un genio de la inexpresividad y pasarse el metraje entero haciendo caras de nada, sino además fracasar estrepitosamente en cada ocasión que intenta esbozar un gesto para realzar la emoción de una escena. Coño, parece que lo haga aposta. Hay una escena en la que enseña a Saphira a volar y el tío prueba con todo tipo de caras y no acierta ni una. Lo dicho, un genio.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Para colmo, hay algunas escenas que bueno... aquí ya han comentado los errores de continuidad y las monumentales estupideces de la flecha que destroza un puente o de entrar en la fortaleza como Pedro por su casa, pero a mí me tocaron la moral un par. ¿Cómo es posible que viajando con alguien como Saphira Eragon llegue como dos días tarde a su casa y ya se encuentre a su tío muerto y bien muerto? ¿Me he perdido algo? ¿No tenía supervelocidad? Y luego está la aparición repentina de Brom para salvar a nuestro héroe en la fortaleza. Pues vale.
De tanto en tanto surgen algunos momentos algo más inspirados que logran salvar los papeles (el asunto del pasado de Brom, o la batalla final contra Durza), pero aparte de eso poquito más. Muy mala.
Eso sí, tiene un puntazo extraordinario que merece todos los premios y alabanzas, y es ni más ni menos que ¡la voz de línea caliente que le ponen a la dragona Saphira!... Estoy muy agradecido al trabajo de doblaje por proporcionarme la emoción más sincera y agradable de toda la película, razón única y primordial por la que vale la pena soportar la hora y media que dura este bodrio. Qué descojone, madre mía, nunca podré olvidar el orgasmo final:
"¡Ah! ¡¡¡Ya no puedo aguantar más!!! ¡Ah!"
De tanto en tanto surgen algunos momentos algo más inspirados que logran salvar los papeles (el asunto del pasado de Brom, o la batalla final contra Durza), pero aparte de eso poquito más. Muy mala.
Eso sí, tiene un puntazo extraordinario que merece todos los premios y alabanzas, y es ni más ni menos que ¡la voz de línea caliente que le ponen a la dragona Saphira!... Estoy muy agradecido al trabajo de doblaje por proporcionarme la emoción más sincera y agradable de toda la película, razón única y primordial por la que vale la pena soportar la hora y media que dura este bodrio. Qué descojone, madre mía, nunca podré olvidar el orgasmo final:
"¡Ah! ¡¡¡Ya no puedo aguantar más!!! ¡Ah!"