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Voto de Erizio:
3
3,1
2.500
Ciencia ficción. Fantástico. Acción
La Tierra al borde de la destrucción tras el regreso de unos gigantescos dragones legendarios que ponen a la humanidad en peligro. El reportero Ethan Kendrick (Jason Behr) intentará investigar qué está pasando y cómo poder impedir la catástrofe... (FILMAFFINITY)
9 de febrero de 2008
39 de 46 usuarios han encontrado esta crítica útil
Por increíble que parezca, una peli titulada "Dragon Wars":
a) es bazofia,
b) es mugre,
c) apenas tiene dragones,
d) cuenta con grandiosos ingredientes pero es basura.
Sí, 3 de los 4 puntos dicen lo mismo. Y como esta peli merece un resumen personalizado, y si hago muy larga la crítica no me da el espacio, resumiré. Interpretaciones cargadas de caspa, un guión más atropellado que las ratas que se pone Nicolas Cage en la cabeza, y tan subnormal que uno no puede dejar de preguntarse si es un mal chiste, o de verdad va en serio tal cantidad de infecteces dialécticas y argumentales repletas de absurdas coincidencias y anormales reacciones, y sobre todo unos efectos especiales de lo más cutre, empezando por el hecho de que dominan menos que yo el noble arte de la aparición/desaparición de objetos, y las escenas por ordenador, que parecen robadas directamente de cualquier Final Fantasy...
Al menos no aburre, y uno se puede reír bastante a costa de ella. Aunque luego te cabrees al ver que de guerras de dragones, absolutamente nada. Y a mí me sigue mosqueando que pueda ser tan mala una peli en la que salen dragones, serpientes gigantes, helicópteros, un chino que vuela y hace magia, y tortugas gigantes con lanzamisiles... pero así es. Otro mito más a la basura.
[Ahora, spoilers]
Pues esto trata de un tío que es periodista y se va a unas excavaciones en Atapuerca o algo así. Viendo que unos tíos están sorprendidos por haber encontrado unas raspas de pescado muy negras y muy grandes, el tío lo observa y recuerda una historia que le sucedió cuando era niño.
Resulta que, en esos tiempos, se fue con su padre a vender una chorrada a un tipo que tenía pinta de vender Gremlins o algo por el estilo. En eso que el chavalín estaba explorando y vio salir de un cofre una luz muy mágica, y el compro-oro, que es un picaruelo, simuló un ataque al corazón para que el padre se pirara y entonces quedarse a solas con el chavalín... Ay, el muy Michael Jackson le contó una leyenda sobre serpientes que se volvían dragones, después de que se comieran a una veinteañera. Al parecer, hace 500 años, el ejército de Sauron, formado por soldados del Final Fantasy XII (no podían elegir sino a los del peor FF), dragoncillos también de Final Fantasy, y tortugas gigantes con lanzacohetes (¿ein?) que también tenían un aire a FF, se dedicaron a perseguir a la muchacha (con un tatuaje draconiano como el de los anuncios de dolor de garganta que seguramente cuando se cabree, te pegue un mordisco el cabrón) que se tenía que comer la serpiente mala. Pero claro, los buenos también están equipados. No son millones, pero tienen a una especie de guardián y a un viejo que lanza chispazos y vuela, como todo chino que se precie. Y la cosa es que estos dos ganan, porque el viejales se funde a todos los mierda-soldados del Final Fantasy, mientras la chavala y su guardián escapan. Pero como están enamorados, se tiran al mar en lugar de dejar que la serpiente buena se alimente...
a) es bazofia,
b) es mugre,
c) apenas tiene dragones,
d) cuenta con grandiosos ingredientes pero es basura.
Sí, 3 de los 4 puntos dicen lo mismo. Y como esta peli merece un resumen personalizado, y si hago muy larga la crítica no me da el espacio, resumiré. Interpretaciones cargadas de caspa, un guión más atropellado que las ratas que se pone Nicolas Cage en la cabeza, y tan subnormal que uno no puede dejar de preguntarse si es un mal chiste, o de verdad va en serio tal cantidad de infecteces dialécticas y argumentales repletas de absurdas coincidencias y anormales reacciones, y sobre todo unos efectos especiales de lo más cutre, empezando por el hecho de que dominan menos que yo el noble arte de la aparición/desaparición de objetos, y las escenas por ordenador, que parecen robadas directamente de cualquier Final Fantasy...
Al menos no aburre, y uno se puede reír bastante a costa de ella. Aunque luego te cabrees al ver que de guerras de dragones, absolutamente nada. Y a mí me sigue mosqueando que pueda ser tan mala una peli en la que salen dragones, serpientes gigantes, helicópteros, un chino que vuela y hace magia, y tortugas gigantes con lanzamisiles... pero así es. Otro mito más a la basura.
[Ahora, spoilers]
Pues esto trata de un tío que es periodista y se va a unas excavaciones en Atapuerca o algo así. Viendo que unos tíos están sorprendidos por haber encontrado unas raspas de pescado muy negras y muy grandes, el tío lo observa y recuerda una historia que le sucedió cuando era niño.
Resulta que, en esos tiempos, se fue con su padre a vender una chorrada a un tipo que tenía pinta de vender Gremlins o algo por el estilo. En eso que el chavalín estaba explorando y vio salir de un cofre una luz muy mágica, y el compro-oro, que es un picaruelo, simuló un ataque al corazón para que el padre se pirara y entonces quedarse a solas con el chavalín... Ay, el muy Michael Jackson le contó una leyenda sobre serpientes que se volvían dragones, después de que se comieran a una veinteañera. Al parecer, hace 500 años, el ejército de Sauron, formado por soldados del Final Fantasy XII (no podían elegir sino a los del peor FF), dragoncillos también de Final Fantasy, y tortugas gigantes con lanzacohetes (¿ein?) que también tenían un aire a FF, se dedicaron a perseguir a la muchacha (con un tatuaje draconiano como el de los anuncios de dolor de garganta que seguramente cuando se cabree, te pegue un mordisco el cabrón) que se tenía que comer la serpiente mala. Pero claro, los buenos también están equipados. No son millones, pero tienen a una especie de guardián y a un viejo que lanza chispazos y vuela, como todo chino que se precie. Y la cosa es que estos dos ganan, porque el viejales se funde a todos los mierda-soldados del Final Fantasy, mientras la chavala y su guardián escapan. Pero como están enamorados, se tiran al mar en lugar de dejar que la serpiente buena se alimente...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Así que los de ahora son reencarnaciones de los del pasado (¿?¿?¿?) Entonces la serpiente mala vuelve para dar por culo, y uno vestido a lo Matrix y que se cree Rutger Hauer o algo por el estilo, que en realidad es Sauron, pretende ayudarla. Se saca un ejército de la manga. Mientras tanto, nuestro periodista intrépido, que es la reencarnación del guardián de la chavalina, la busca por todas partes gracias a su amigo negro. La encuentran así porque sí, pero la tienen ahí en un hospital como si se le hubiera ido la olla, porque le han dado unos cuantos fluses así porque sí. A otro tipo también le tienen por loco porque ha visto a la pedazo de serpiente esa que ni Rocco Sifredi. Pero todo cambia cuando el peaso de víbora fistra de la pradera se va al hospital a tocar las narices, pero justo a tiempo para que el prota pueda huir con la chica mientras el reptil les persigue arrasando con todo. Atropellan al Rutger Hauer, aunque en realidad cuando el coche está a unos dos metros del tipo... y pasando a su lado, por cierto, se cambia con un muñeco de esos para probar la resistencia a accidentes y tal, más rápido que en Naruto. Sauron se levanta, hace aparecer una espada de un mango (pero no es láser), y vuelve a ser atropellado por una don nadie, que se lleva a los protas por ahí. La tipa resulta que es el anciano, antaño volador, que está más de relleno que el 70% de los episodios de Naruto.
Los dos zagales escapan y escapan, mientras las hordas de Sauron se cargan la gran ciudad, sin que los helicópteros americanos destructores puedan hacer nada, sólo gastar el pobre presupuesto de la cinta. La serpiente persigue a los protas, y aunque tiene a huevo a la tía, antes de devorarla siempre se queda parada no se sabe por qué, y ya pueden escapar. Pero al final, por alguna razón, acaban prisioneros del Sauron, que prepara un ritual kingkongniano. Pero de nuevo, en el último momento, se salva la muchacha, porque la serpiente buena, que es igual que la mala, hace acto de presencia. Una ridícula batallita que da pena, y cuando parece que la mala ha ganado, la chiquilla se transforma en una pelota fosforescente, que debe ser una bola dragón. Se mete en la serpiente buena, que automáticamente se convierte en el dragón de Dragon Ball. Pero no concede deseos, sino que simplemente se folla vivo a la serpiente mala, y se larga. Seguramente estarían jugando a dobles al Snake, y claro, en lo que se convierte la prota es en el típico circulito que te hace crecer más... y pasa lo que pasa, porque si no, no lo entiendo.
Y sí, hay muchas lagunas, pero mi cerebro se ha protegido buenamente. Os dejo a vosotros que descubráis las innumerables chorradas que inundan el filme. Es algo más divertido que quedarse simplemente a verlo/sufrirlo.
Los dos zagales escapan y escapan, mientras las hordas de Sauron se cargan la gran ciudad, sin que los helicópteros americanos destructores puedan hacer nada, sólo gastar el pobre presupuesto de la cinta. La serpiente persigue a los protas, y aunque tiene a huevo a la tía, antes de devorarla siempre se queda parada no se sabe por qué, y ya pueden escapar. Pero al final, por alguna razón, acaban prisioneros del Sauron, que prepara un ritual kingkongniano. Pero de nuevo, en el último momento, se salva la muchacha, porque la serpiente buena, que es igual que la mala, hace acto de presencia. Una ridícula batallita que da pena, y cuando parece que la mala ha ganado, la chiquilla se transforma en una pelota fosforescente, que debe ser una bola dragón. Se mete en la serpiente buena, que automáticamente se convierte en el dragón de Dragon Ball. Pero no concede deseos, sino que simplemente se folla vivo a la serpiente mala, y se larga. Seguramente estarían jugando a dobles al Snake, y claro, en lo que se convierte la prota es en el típico circulito que te hace crecer más... y pasa lo que pasa, porque si no, no lo entiendo.
Y sí, hay muchas lagunas, pero mi cerebro se ha protegido buenamente. Os dejo a vosotros que descubráis las innumerables chorradas que inundan el filme. Es algo más divertido que quedarse simplemente a verlo/sufrirlo.