De momento esta saga ha funcionado de maravilla; pero tanta secuela comienza a recordarme otras sagas como Viernes 13, Pesadilla en Elm Street o, en otro género, Rocky. Estas sagas se estrenaron con películas que llamaron la atención pero que acabaron narcotizándonos a base de crear una secuela tras otra (11, 9 y 6 respectivamente). Saw puede acabar igual.

Saw 3 es más de lo mismo y prácticamente se ha perdido toda la originalidad. Ya sabemos quién es Jigsaw y por supuesto de lo que es capaz, de modo que ahora esta saga sólo puede llamarnos la atención mostrandonos sus nuevas ocurrencias e inventos. Además la técnica es prácticamente la misma: giros inesperados de guión y, por supuesto, flashbacks. A ver con qué nos sorprenden con Saw 4.