Esta continuación de la pequeña saga de Gremlins no es que sea mala pero tampoco es un bombazo como lo fue la anterior primera parte, ya que para los seis años que tardó en salir podía haber sido mejor, la verdad, pues aunque esta segunda parte es buena no lo es tanto en comparación con la otra. El film tiene escenas interesantes, pero en la inevitable comparación con la primera parte sale perdiendo, ya que la primera parte la he visto sobradas veces y esta sólo la he visto una vez, pero en esa única vez que la he visto me he dado cuenta de que desde luego no es mejor que la primera parte, pues no tiene la genialidad que Steven Spielberg sabe dar a sus extraordinarias películas.

Además porque si no la primera parte la echan a menudo por televisión y esta mediocre segunda parte tan sólo la visto una vez, o sea casi nunca en comparación con la genial primera parte.
El caso es que el señor Joe Dante no lo ha sabido hacerlo mejor que la anterior y por eso este segundo film de la saga Gremlins no es mejor que la primera.
Y eso que antes de verla tenía bastantes ganas de ver como iba a ser esta continuación, pero después de verla me lleve una decepción por todo lo que acabo de decir en esta crítica, aunque curiosamente, y al igual que sucediera con la anterior peli de los Gremlis, también hay una novela basado en el guión del film, que por supuesto no es el mismo de la anterior novela, si no que es David Bischoff, autor de otros de pelis como Juegos de Guerra, Hackers, etc.