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España España · Córdoba
Voto de echulin:
8
Comedia. Romance Lee Holloway (Maggie Gyllenhaal) tiene el peor de los currículum cuando decide solicitar un empleo de secretaria en el bufete de abogados de E. Edward Grey (James Spader). Basta con decir que acaba de salir de una institución psiquiátrica y que, tan sólo un día después de volver a estar con su disfuncional familia de barrio periférico, ha recaído ya en su hábito secreto e inconfesable. Pese a que nunca en su vida ha tenido trabajo, Lee ... [+]
20 de julio de 2012
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
No estoy de acuerdo con algunas críticas que hablan de una película de sadomasoquismo, al menos en su significado habitual. Yo por sadomasoquismo entiendo dar y recibir placer a través del dolor y la humillación. Aquí no hay humillación y el dolor que uno infringe al otro se limita a unas palmadas en el trasero.

Tampoco creo que sea una historia de amor, una comedia romántica a la que sólo le faltan Tom Hanks y Meg Ryan (secretaria que se enamora del jefe, etc.). No veo yo a Meg a cuatro patas y Tom eyaculando en su espalda.

Yo creo que es más bien una película que trata sobre la dependencia que se establece entre dos personas inestables. Ella es una tarada que se enfrenta a la vida con miedo y aprensión, y él es un depredador de tontitas vulnerables. Lo demás viene rodado.

Hay en el guión una pequeña genialidad que a mí al menos me ha llamado la atención: la primera escena cuando coge la carta, recoge el fax y prepara el café. Eso hace que el resto de la película haya una terrible tensión sexual no resuelta (tan conocida en las series de TV). Si eliminas esa primera escena, pasarías media película creyendo que James Spader realmente está ayudando a Maggie Gyllenhaal a superar sus problemas psicológicos, y que lo hace desinteresadamente.

Estoy de acuerdo en que si los protagonistas fuesen actores famosos, la peli hubiese sido un bombazo, al estilo 'instinto básico' (mira, podríamos llamarla 'instinto sádico'). Si pones de jefe a Sean Connery y de secretaria a Megan Fox, por ejemplo. Ya por poner a Megan Fox en pompa con las medias y las bragas por las rodillas, yo iría a verla. Pero no es menos cierto que con actores famosos hubiese perdido su encanto. Además, las grandes productoras de Hollywood no se arriesgan tanto ni quieren guiones fuera de lo convencional.

Una peli que puede que no te guste, pero que no te dejará indiferente.
echulin
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