Hubo un tiempo en el que los blockbusters no eran un cúmulo de efectos generados por ordenador y guiones infantilizados escritos por tipos sin cabeza. Sé que esa época queda lejos, aquellos maravillosos años 80-90, que dieron paso a ‘Con Air’, ‘Jungla de Cristal: La Venganza’, ‘Speed’ y muchas más, auténticas joyas que engrosaron mi filmoteca y que, a día de hoy, siguen siendo muy superiores a cualquier entrega de, por ejemplo ‘Fast & Furious’.

También sé que la habéis visto cientos de veces en televisión y que no os voy a descubrir nada nuevo de esta aventura protagonizada por Sean Connery, Ed Harris y Nicolas Cage. Pero a veces gusta recordar tiempos más felices. Uno echa la vista atrás y ve que aquellos títulos y los compara con el panorama actual y es para ponerse a llorar. ¿O no echáis de menos a Sean Connery? ¿O cuando Nicolas Cage era capaz de hacer cintas taquilleras? Ambos coincidieron en un punto álgido de sus carreras para protagonizar la, por entonces, última gran aventura del productor Jerry Bruckheimer. ¡Y qué gran pareja hacen!

Mucho antes de que se hiciera famoso por ‘Piratas del Caribe’, Bruckheimer producía cintas de acción para el verano que solían arrasar en taquilla y esta fue una de las pioneras. Planteando una situación bastante inverosímil, sólo alguien con la audacia de Michael Bay podría sacar una aventura, un tour trepidante, adrenalínico e inolvidable por la olvidada cárcel de Alcatraz (la historia fue rodada en la verdadera cárcel). Desde los túneles hasta la superficie, Bay mezcla los mejores componentes del cine de aventuras con la acción desmedida, como mejor sabe hacerlo.

Luego está Ed Harris, que solo con su presencia mejora la película y, aquí, se come la pantalla cada vez que aparece vestido de militar, bien secundado por David Morse al frente de la pareja protagonista. ¡Pero si es que no falta tampoco Michael Biehn comandando la misión de rescate!

Además, cuenta con inolvidables secuencias de acción, antes de meterse en faena con la gran persecución por las calles de la ciudad de San Francisco con un Ferrari y un Hummer, con el tranvía volando por los aires envuelto en llamas y, una vez dentro de la prisión, esos túneles, ese Connery pasando entre el fuego, encumbrado en antiguo espía británico con guiño a lo 007 y que se pasa la película salvando el culo a Cage. Son escenas que quitan el hipo mientras, la banda sonora, magistral, compuesta por el gran Hans Zimmer, te termina por introducir en la película.

Hay tantos alicientes, tantos momentos que dejan tan grato recuerdo que siempre vuelvo a ‘La Roca’ cada vez que puedo.

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