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Voto de septemberghost:
3
Ciencia ficción. Aventuras. Fantástico. Acción Un año después de los eventos de "Los últimos Jedi", los restos de la Resistencia se enfrentarán una vez más a la Primera Orden, involucrando conflictos del pasado y del presente. Mientras tanto, el antiguo conflicto entre los Jedi y los Sith llegará a su clímax, lo que llevará a la saga de los Skywalker a un final definitivo. Final de la trilogía iniciada con "El despertar de la Fuerza". (FILMAFFINITY)
23 de diciembre de 2019
35 de 53 usuarios han encontrado esta crítica útil
Asuman las consecuencias.

Entiendo que el episodio VIII (Los últimos Jedi) no fuera plato de gusto para todo el mundo. El guion no era, ni de lejos, una maravilla argumental ni una estructura dramática sin fisuras. Sin embargo, para los estándares de la saga siempre, SIEMPRE, diré que es una película con una valentía que ya le gustaría tener a los otros dos episodios de esta saga (especialmente el que estoy comentando en esta crítica). Rian Johnson tuvo sus pifias con su episodio de la saga, pero la película no fue mala en absoluto. Tuvo unas cuantas escenas buenas y plantó varias semillas para hacer progresar la saga hacia caminos que habría sido interesante explorar:

- Que la galaxia no es meramente un choque Resistencia vs Imperio. Hay intereses políticos, sociales y económicos para que la guerra siga siendo rentable e interesante para las élites, y todo va mucho más allá de un simple cuento del bien y del mal. Es una bocanada de realidad muy necesaria para una saga tan importante para la cultura pop como es Star Wars.

- Que el mal y el bien son conceptos tan relativos como la suma de valores que pueda defender un personaje. Kylo Ren es el héroe de su propia historia, ascendiendo a Líder Supremo porque se consideraba el más apto para liderar el universo. Luke creía estar haciendo lo correcto cuando, obcecado en evitar el ascenso de otro Darth Vader, casi se deja consumir por el lado luminoso y comete un grave error. Todo indicaba que la clave de esta nueva saga no debía haber sido un Luz vs Oscuridad, sino el camino al equilibrio con Rey como estandarte para ello (Jedis grises, por Dios).

- Que el nepotismo es cosa de humanos, y no de la Fuerza. La Fuerza no selecciona a los más aptos con base en la sangre, sino que es una energía de equilibrio universal, de vida, y por lo tanto es completamente democrática (amén de ese simbólico plano final de un niño usándola sin complicaciones, soñando con ser libre algún día).

Y sí, también que los héroes pueden errar y que las leyendas tienen normalmente a gente, humana e imperfecta, tras las mismas. ¿Ven la lista que acabo de hacer? Pues J.J. Abrams, a las órdenes de Kathleen Kennedy, la anotaron en un papel, hicieron una bola y la tiraron al incinerador. Fueron conscientes de las quejas, vaya que lo fueron. Y también se fijaron en la campaña organizada de acoso a través de Internet, en el sabotaje sistemático de todo lo que tuviera que ver con Star Wars, en los miles de vídeos de más de 2 horas de gente arremetiendo contra The Last Jedi con argumentos tan contundentes como "nos quieren colar feminismo". Tomaron nota de todo.

Nada de novedades.

Olvidémonos de innovar.

Y hagamos, por todos los medios, que los fans y el público olviden completamente el episodio VIII volviéndolo completamente irrelevante. En lugar de apostar por talentos como el de Colin Trevorrow, vayamos a lo más seguro.

Así que enhorabuena, Lucasfilms, y enhorabuena, "fans de toda la vida". Aquí tenemos el resultado: el fan fiction más largo y caro de la historia del cine. Todo se lleva por "lo seguro", bien masticadito, explicado y reconocible: un parche del episodio V por aquí, un calco absoluto del episodio VI por allá, muchos arreglos del episodio VIII... Voilà, ya tenemos "El ascenso de Skywalker".

¿Ese submundo de la élite de la guerra, que explicaría por qué las guerras nunca terminan? Nada, nada, si al final todo es cosa de Palpatine. Sustituyamos un elemento orgánico de la trama por un DEUS EX MACHINA de primero de guion de cine.

¿Se acuerdan de lo relativo que podía ser el mal y el bien? Pues mira, no, resulta que el malo principal es muy malo porque sí, y los buenos son muy buenos porque sí. Nada de desarrollo dramático, ninguna catarsis, ningún tipo de evolución dramática. Volvemos a las polaridades absurdas.

¿Y eso de que la Fuerza no es propiedad de pocas familias? Qué buena broma. Ahora todo tiene que ver, una vez más, con la sangre y el apellido.

Con los pilares argumentales bien destrozados, añadimos personajes secundarios perfectamente intercambiables, situaciones (con muy buena cinematografía, eso sí) vacías de alma, chispa y gracia y un argumento completamente esperable de lo mucho que intenta complacer a los fans (más que contar una buena historia) y aquí tenemos lo que todos querían. Un final de fiesta que quiere complacer a todo el mundo y hacer pasta.

Asuman las consecuencias, todo el mundo. Los que se quejaron rayando el punto del acoso y la obsesión cibernauta. Los ejecutivos que se acobardaron y sacaron una película mediocre. Esto es lo que sucede cuando castigas la creatividad de forma inclemente.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
septemberghost
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