Sin lugar a duda, la mejor serie de la historia. Golpes tontos, golpes inteligentes... personajes animados que tienen una personalidad propia, como actores reales, como personas reales. Situaciones cotidianas alimentadas con detalles casi fantásticos e irreales, aventuras disparatadas, crítica no sólo al hombre americano, también al europeo. Crítica inteligente a las instituciones y sistemas que mueven el mundo (religión, política, activismo, superstición, deporte, arte...). Divertida, con lógica, triste en algunos momentos. Trata un amplísimo abanico de temas (en tantos capítulos...lógico) desde las primeras relaciones entre adolescentes, a los problemas económicos, laborales, matrimoniales, espirituales, sexualidad, arriesgándose con temas polémicos y de actualidad (en su momento). Fantásticos cameos de personajes conocidos explotando alguno de sus tópicos, en ocasiones de manera "oculta". Y todo ello bajo la máscara de unos originales dibujos animados.
Genial, única, para ver una y otra otra vez... Esta familia se ha colado en las casas de miles de hogares para siempre.