Hace tiempo que llevo escuchando cosas positivas de esta película, ya que la han dejado de revolucionaria, diferente o un bofetón a la corrección política. La verdad es que todo parecía indicar que estábamos ante una comedia negra y gamberra para pasar un buen rato.

Pues todo lo contrario. Estamos ante un drama pretencioso que arranca en sus últimos veinte minutos. Como lo leéis. Sería otra de esas campañas de marketing engañosas que venden una película como lo que no es.

No esperéis a las protagonistas a lo "Kill Bill",  como parece indicar el cartel de la película, porque eso es solo una escena de cinco minuto (siendo generoso). Y no, esto no es un "spoiler", se llama dejar las cosas claras y no estafar al personal, porque eso es lo que es esta película, una estafa a modo de panfleto, que se las da de revolucionario, cuando se queda más bien en tierra de nadie.

Sí, tiene elementos interesantes, como la trama del director o el alcalde y el mensaje que transmite, pero fuera de eso, son casi todo escenas de adolescentes que criticamos en otras películas y series, pero que parece que aquí aplauden a rabiar, cuando asistimos a una hora y veinte minutos que jamás termina de arrancar y a la que le sobran muchos minutos.

Y esperad, que el esperado final es un "quiero y no puedo", dejando patente que estamos ante un ejemplo perfecto de "Mucho ruido y pocas nueces". La película arranca con un inicio prometedor que nos anuncia una salvajada (como indica el título), cuando nada de lo visto llega a sorprender, a no ser que sea inverosímil (lo que sucede en la media hora final es surrealista hasta decir basta), y encima con una violencia que se las promete de descarnada, y también deja indiferente.

Estamos ante un drama que despierta al final, cuando ya es tarde, y todo ello camuflado de "película de culto" o "políticamente incorrecto", cuando nada nuevo luce bajo el sol. Aunque el final tenga su gracia, quizás lo único destacable (aparte de lo expuesto).

La dirección es de corte independiente, y las (escasas) escenas de acción o violencia no son nada del otro aquel. El guion es bobo y muy obvio, y no esperéis que profundicen en sus cuatro personajes femeninos, porque tres de ellas tienen pocas líneas de diálogo, y solo una es la protagonista. Nueva estafa.

Y bueno, el reparto... quizás el punto más positivo de la cinta, aunque tampoco nos volvamos locos. Cumplen, sin más.

En conclusión, estamos ante una película engañosa, que se vende como lo que no es, y que se queda en tierra de nadie. No merece la pena el suplicio por veinte minutos que tampoco son nada del otro aquel. Pretenciosa y olvidable. 

Más críticas: ocioworld.net