Son incontados los buenos -y malos– poetas que han prometido el cielo, la luna y las estrellas, para merecer el amor de una doncella; y todos ellos han estado equivocados… porque el amor es imposible comprarlo. Quizás alcances, con tales dádivas, el roce de aquella piel que tanto anhelas; de pronto consigas acceder a un contacto íntimo en una noche de lluvia... pero el Amor, entendido como ese sentimiento de entrega incondicional que sólo se siente por aquel ser que despierta mi ternura y mis mejores emociones, es imposible pagarlo porque se da, de ser a ser, en forma totalmente sincera y desinteresada.

El Tristán de, <<STARDUST>>, es otro iluso dispuesto a alcanzar una preciosa y especial estrella fugaz, con tal de merecer el amor de la bella y frívola, Victoria. Para enredarle la vida, en el medio están los hijos del rey que también ansían alcanzarla para merecer el trono de su desgastado padre... y éstos hijos del reino de Stormhold, son también grandes ciegos, dispuestos a cualquier atropello para lograr esa suerte de poder que lleva siempre a la perdición. Un mosaico de cadáveres ilustres deambularán largo tiempo, viendo como la vida, después de todo y contra todo, termina haciendo justicia.

Y hay alguien más, anhelando aquella estrella desesperadamente: la bruja Lamia. Otra incauta que, como Michael Jackson, sueña con la fuente de la eterna juventud desde la materia, ignorando que uno se siente joven cada que acepta el hoy a plenitud. Ésto desde lo material, porque, desde lo espiritual, el ser es eternamente joven por esencia divina, pero, solo se comprende al momento de reencontrarse con la luz primigenia.

La ávida búsqueda de aquel grupo de incautos, nos pone ante situaciones de acción trepidante, agradable fantasía y una impecable banda sonora que impone fastuosidad a cada escena. Michelle Pfeiffer, nos concede el único toque brillante en la actuación, mientras sorprende que, Robert de Niro, se haya prestado para tan nimio papel.

Dirigido por Matthew Vaughn, <<STARDUST>>, se convierte, al final, en un agradable cuento de hadas que entretiene mientras ejemplifica algunas cosas que, para la humanidad, no están todavía suficientemente aprendidas.

Y cabe recordar que, nada de verdadera relevancia podrás hallarlo en la materia. Todo lo grande, todo lo maravilloso y todo lo trascendental, se encuentra en el ser y sólo allí. Reencuéntrate contigo mismo, conoce quién eres realmente y un día te sorprenderás al descubrir que, lo que realmente existe, todavía no consigues verlo.

Seas quien seas ahora, y por apagado que estés, igual que, Yvaine, también tú eres una estrella, y cuando lo decidas, podrás comprobar que te es dado brillar en medio de la oscuridad.

Título para Latinoamérica: <<STARDUST, EL MISTERIO DE LA ESTRELLA>>