Primero que todo quiero decir que no me he leído los libros, ni sé si la película sea fiel, así que sólo la valoraré solo en su aspecto cinematográfico y no en el de su fidelidad a la fuente literaria.
Harry Potter ha sido una saga impresionante sobretodo en el número de fanáticos conseguidos, las películas no son ningunas obras maestras del cine, ni siquiera las dos mejores: la tercera y la primera parte de la séptima. Ésta no es la excepción, increíblemente entretenida, con enormes aciertos y grandes fallos, pero a pesar de todo una película que supera el aprobado.
Así que empecemos, la calidad visual como no puede ser menos, es bastante buena, a excepción de algunas escenas finales en las que la cámara parece vieja y la iluminación es nefasta. El guión está lleno de machetazos inexplicables y el que no quiera ver eso allá él. El ritmo es trepidante y no te deja despegarte de las sillas. Hay algunas escenas verdaderamente hermosas, alguien ya las describió pero yo lo volveré a hacer en el spoiler. Y hay otras escenas horribles en las que todos en la sala nos partimos de la risa de lo malas que eran.
En general una película disfrutable, pero para nada digna de ni una sola nominación al óscar, excepto si es en el apartado visual o en la gran interpretación de Rickman. Para terminar, me pregunto si habrán despedido al montador en las escenas finales y alguien más se encargó de pegar las escenas de esa forma, dándoles un injusto final a muchos personajes, cogiendo una escena de por aquí y otra de por allá.
Y puedo parecer molesto, porque la parte uno me pareció impresionante de una dirección asombrosa, con gran dedicación al aspecto actoral, aspectos en la que esta falla. Igual sigue siendo una más o menos digna conclusión a la saga.