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Voto de Mario Cuesta Argos:
71.817
Aventuras. Drama
A principios de los años noventa, el joven e idealista Christopher McCandless (Emile Hirsch), adopta el nombre de Alexander Supertramp, deja sus posesiones y sus ahorros a la beneficencia y abandona el mundo civilizado con rumbo a la salvaje Alaska para entrar en contacto con la Naturaleza y descubrir el verdadero sentido de la vida. Adaptación del best-seller de Jon Krakauer, basado en las notas del diario de McCandless. (FILMAFFINITY)
8 de enero de 2016
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
El señor France dice: "Me pareces un chico inteligente".
A lo que Alex responde: "Al menos tengo la cabeza sobre los hombros".
¿¿¿¿¿PERDONA?????
No he visto comportamiento más infantil, malcriado y prepotente (a la par que afortunado) en ninguna película antes. Alex Supertramp representa, según mi parecer, el prototipo de hijo de familia adinerada que ya ha tenido suficientes experiencias vitales gracias al dinero de sus padres, y ahora se siente con la necesidad de experimentar lo que es vivir con nada, sin ninguna muestra de madurez ante los sentimientos de los demás o sobre si mismo.
Me da miedo que quien vea la película pueda llegar a la conclusión de que es posible lo que este chico se propuso y consiguió. Fribolizar con el dinero y recorrerse gran parte de Estados Unidos (el país capitalista por excelencia) me parece una broma de mal gusto, o un golpe de suerte que sucede en un caso cada 10.000 (siendo los otos 9.999 los llamados "Cómo llegar robado, maltratado y violado a Alaska").
Sin embargo, todo esto ha hecho que, en vez de disfutar con el personaje aprendiendo a quererlo, he disfrutado aprendiendo a detestar este tipo de comportamiento antisistema.
Creo que la moraleja que saco de esta película consiste en que la verdadera inteligencia consiste en no obsesionarse por el dinero pero aprender a vivir en sociedad, sin renegar de esa parte que nos hace seres racionales.
A pesar de todo, me quedo con la frase que dice el propio Alex con la que sí estoy de acuerdo:
"El espiritu del hombre se basa en nuevas experiencias"
Y añadiría:
"Sin renegar de las ya vividas"
A lo que Alex responde: "Al menos tengo la cabeza sobre los hombros".
¿¿¿¿¿PERDONA?????
No he visto comportamiento más infantil, malcriado y prepotente (a la par que afortunado) en ninguna película antes. Alex Supertramp representa, según mi parecer, el prototipo de hijo de familia adinerada que ya ha tenido suficientes experiencias vitales gracias al dinero de sus padres, y ahora se siente con la necesidad de experimentar lo que es vivir con nada, sin ninguna muestra de madurez ante los sentimientos de los demás o sobre si mismo.
Me da miedo que quien vea la película pueda llegar a la conclusión de que es posible lo que este chico se propuso y consiguió. Fribolizar con el dinero y recorrerse gran parte de Estados Unidos (el país capitalista por excelencia) me parece una broma de mal gusto, o un golpe de suerte que sucede en un caso cada 10.000 (siendo los otos 9.999 los llamados "Cómo llegar robado, maltratado y violado a Alaska").
Sin embargo, todo esto ha hecho que, en vez de disfutar con el personaje aprendiendo a quererlo, he disfrutado aprendiendo a detestar este tipo de comportamiento antisistema.
Creo que la moraleja que saco de esta película consiste en que la verdadera inteligencia consiste en no obsesionarse por el dinero pero aprender a vivir en sociedad, sin renegar de esa parte que nos hace seres racionales.
A pesar de todo, me quedo con la frase que dice el propio Alex con la que sí estoy de acuerdo:
"El espiritu del hombre se basa en nuevas experiencias"
Y añadiría:
"Sin renegar de las ya vividas"
