Una de esas películas serias que intentan contarte las cosas tal cual son, sin almíbares ni grandilocuencia. Y lo consiguen, porque es creíble, porque sabemos que así fue en realidad, Bush desde los Estados Unidos, con el apoyo de Blair de Gran Bretaña (y Aznar de España, que aquí lo omiten, porque siempre es secundario e innecesario), mintieron a la opinión pública mundial sobre las -inexistentes- armas de destrucción masiva de Irak para justificar una guerra injusta (como si alguna guerra fuese justa)
¿Puede parecer aburrida? La burocracia lo es, y esta película va de eso. Está tan bien contada, se toman tan en serio, porque fue algo muy serio, la historia que cuentan, que la misma Keira prescinde de sus habituales muecas para convertirse en una actriz "de verdad". De hecho, creo que el papel que hace esta mujer es el mejor de su carrera o, al menos, el más serio. Ella es lo mejor de la película.