Una pasada. Cumberbatch se sale y Keira no se queda atrás. La historia es fascinante y el personaje en el que se basa un puto héroe. Espero que la reina al menos se sonrojara de vergüenza al "concederle el perdón real póstumo"... qué vergüenza.

La trama está magníficamente hilada, no hacen falta efectos especiales asombrosos para atrapar al espectador (un 10 para los guionistas) y, aunque creo que la banda sonora pasa un poco desapercibida (también puede ser lógico) la película es una maravilla. Los actores están geniales como ya dije, el guión atrapa, los cambios temporales, aunque al principio chocan un poco (probablemente adrede) son digeribles y se van mostrando necesarios conforme avanza la historia.

¡Apasionante! La historia real merece esto y más, claro.