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Voto de THE CROW:
9
8,4
34.618
Cine negro. Intriga. Thriller
En la ciudad de Los Angeles un agente de una compañía de seguros (Fred MacMurray) y una cliente (Bárbara Stanwyck) traman asesinar al marido de esta última para así cobrar un cuantioso y falso seguro de accidentes. Todo se complica cuando entra en acción Barton Keyes (Edward G. Robinson), investigador de la empresa de seguros. (FILMAFFINITY)
8 de agosto de 2008
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Siento debilidad por el cine que realiza Billy Wilder, cuando el hombre se centra en la comedia lo borda, pero cuando sus tentáculos abarcan otro tipo de género, como en el caso que nos toca...sabe rizar el rizo.
Un film para enganchar al espectador, debe tener un comienzo trepidante y que no se ande por las ramas, hay que llevar al espectador rápidamente al corazón de la trama, que se identifique velozmente no tan solo con la historia, sino a la vez...con los personajes.
Primera escena, vemos a un coche venir a mucha velocidad y descontrolado, poniendo en peligro la vida de unos obreros y saltándose un semáforo con el peligro que esto conlleva. Y nos preguntamos, ¿ porqué tanta prisa ?
Sin embargo, según baja del vehículo, nos encontramos a una persona de unos movimientos muy pausados, renqueante al cual le cuesta dar unos cuantos pasos seguidos. Sube en el ascensor y una vez dentro de la oficina, prepara una especie de grabadora que se usaban en esos tiempos y cuenta una " confesión ".
A partir de aquí comienza la obra de arte del señor Wilder, el personaje en primera persona nos irá contando con todo tipo de detalles la historia, sin prisas, pero sin pausas. Presentando a su debido tiempo a todos los personajes que intervendrán en esta magnífica trama. Al estilo " ATRACO PERFECTO " de Stanley Kubrick, es imposible perder el hilo de la historia, ya que nos la presentan de forma sencilla y directa.
Tres protagonistas principales en esta historia:
FRED MacMurray, ( Walter Neff ): agente de seguros y conocedor de todos los entresijos del trabajo.
BARBARA Stanwyck, ( Phyllis Dietrichson ) : esposa de la futura víctima y principal cerebro de la trama.
EDWARD G. Robinson, ( Barton Keyes ) : compañero de trabajo de Walter, curtido en 1000 batallas y difícil de engañar en casos de fraudes.
Pues con estas reseñas comienza la conspiración para llevar a cabo el asesinato perfecto, pero realmente ¿ es posible matar a alguien y salir impune ?
Con tanto especialista en el tema, ¿ tendrá posibilidades de éxito dicho plan ?
Inquietante, escalofriante, turbadora, conmovedora, tiene todos los adjetivos posibles para hacernos pasar un tiempo muy agradable disfrutando de esta maravilla.
Recomendable a todos los amantes del buen cine, incluido aquellos que huyen del cine clásico.
Un film para enganchar al espectador, debe tener un comienzo trepidante y que no se ande por las ramas, hay que llevar al espectador rápidamente al corazón de la trama, que se identifique velozmente no tan solo con la historia, sino a la vez...con los personajes.
Primera escena, vemos a un coche venir a mucha velocidad y descontrolado, poniendo en peligro la vida de unos obreros y saltándose un semáforo con el peligro que esto conlleva. Y nos preguntamos, ¿ porqué tanta prisa ?
Sin embargo, según baja del vehículo, nos encontramos a una persona de unos movimientos muy pausados, renqueante al cual le cuesta dar unos cuantos pasos seguidos. Sube en el ascensor y una vez dentro de la oficina, prepara una especie de grabadora que se usaban en esos tiempos y cuenta una " confesión ".
A partir de aquí comienza la obra de arte del señor Wilder, el personaje en primera persona nos irá contando con todo tipo de detalles la historia, sin prisas, pero sin pausas. Presentando a su debido tiempo a todos los personajes que intervendrán en esta magnífica trama. Al estilo " ATRACO PERFECTO " de Stanley Kubrick, es imposible perder el hilo de la historia, ya que nos la presentan de forma sencilla y directa.
Tres protagonistas principales en esta historia:
FRED MacMurray, ( Walter Neff ): agente de seguros y conocedor de todos los entresijos del trabajo.
BARBARA Stanwyck, ( Phyllis Dietrichson ) : esposa de la futura víctima y principal cerebro de la trama.
EDWARD G. Robinson, ( Barton Keyes ) : compañero de trabajo de Walter, curtido en 1000 batallas y difícil de engañar en casos de fraudes.
Pues con estas reseñas comienza la conspiración para llevar a cabo el asesinato perfecto, pero realmente ¿ es posible matar a alguien y salir impune ?
Con tanto especialista en el tema, ¿ tendrá posibilidades de éxito dicho plan ?
Inquietante, escalofriante, turbadora, conmovedora, tiene todos los adjetivos posibles para hacernos pasar un tiempo muy agradable disfrutando de esta maravilla.
Recomendable a todos los amantes del buen cine, incluido aquellos que huyen del cine clásico.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Realmente este caso en nuestro siglo, no hubiese llegado a buen puerto. Con los adelantos que existen en la ciencia forense, huellas, programas informáticos, se descubriría el pastel de forma muy rápida.
Ahora, hay cosas que aún en 1938, se hubiesen realizado de forma más inteligente.
Por ejemplo:
1) Si te dejas ver en un sitio público, por lo menos disfrázate para pasar desapercibido, cualquier testigo hubiese confirmado las visitas de ambos al supermercado.
2) Todas esas visitas en la casa de Walter, ¡¡¡ pero hombre !!! no te das cuenta que os están vigilando a los dos.
3) Las llamadas telefónicas, con lo chismosas que eran las operadoras en esos tiempos.
4) Se carga a la señora, y en vez de dejar que el muchacho cargue con las culpas, le da 25 centavos para que llame a su chica...si no lo veo no lo creo.
Ahora, hay cosas que aún en 1938, se hubiesen realizado de forma más inteligente.
Por ejemplo:
1) Si te dejas ver en un sitio público, por lo menos disfrázate para pasar desapercibido, cualquier testigo hubiese confirmado las visitas de ambos al supermercado.
2) Todas esas visitas en la casa de Walter, ¡¡¡ pero hombre !!! no te das cuenta que os están vigilando a los dos.
3) Las llamadas telefónicas, con lo chismosas que eran las operadoras en esos tiempos.
4) Se carga a la señora, y en vez de dejar que el muchacho cargue con las culpas, le da 25 centavos para que llame a su chica...si no lo veo no lo creo.