Hace muy poco, un buen amigo me la recomendó, así que me dispuse a verla.
En principio no pintaba mal, Johnny y Benecio dispusieron algunas gracias bastante buenas, con lo que se hacía pasable el rato.

Cuando se aproximaba el ecuador de la película, donde los delirios y alucinaciones comenzaban a ser la tónica, asomaron en mí dudas tales como el argumento y la finalidad del filme, que al acabar el mismo tendrían su respuesta.

El argumento parece ser el de un reportero y su abogado que van a cubrir una carrera a Las Vegas, el cual se vuelve innecesario cuando ambos personajes se envuelven en un frenesí de abuso de drogas y alcohol tan violento que hace que todo pase a segundo plano. Todos aquellos eventos que los rodean son vistos difusamente por su alterada conciencia, que en ocasiones son divertidos y en otros repugnantes.

Cuando la película llega a su apoteosis final, teñida de un clima borroso, delirante y frenético, mis dudas se despejaron y se vio claro que la intención del director no era otra que crear expectación para algo que no iba a suceder, y acabamos con que los dos individuos (por cierto Deep genial), han injerido/ esnifado/ fumado todo aquello que podían y ese fué el resultado.

Cierto es que, esta si es una de esas películas que o te gustan mucho o las detestas. En mí caso no es ni una cosa ni otra, simplemente que no me llenó para nada, la vi totalmente sin argumento y vacía, aún así ni la odio ni siento repulsión, simplemente no me gustó.

Recomendación del estilo pero mucho mejor: Trainspotting