Es una entretenida película que cuenta con tres excelentes actores (Viggo Mortensen, Kirsten Dunts y Oscar Isaac), protagonistas casi únicos de la historia, que entran de lleno en el universo de la escritora Patricia Highsmith. Recuerda un poco, sólo un poco, a “El talento de Mr. Ripley” de Anthony Minghella, aunque esa adaptación, siendo también interesante e entretenida, no sé porqué, hacia el final descarrilaba un poco. Me recuerda a “Ripley”, tal vez, por el encanto de Atenas, Creta y, sobre todo, de la Grecia más profunda, allí era Italia, pequeños pueblos con calles de adoquines y cargados de paz y tranquilidad, parajes con encanto y caminos largos e interminables y ruinas pedregosas y polvorientas, reflejo al fin de la ambivalencia por la que transitan unos personajes con demasiados secretos a sus espaldas.

Es una película de socarrones y/o estafadores, a pequeña o gran escala, unidos por una adversidad común, Rydell y Chester (Oscar Isaac y Viggo Mortensen), que están obligados a entenderse para continuar su viaje de supervivencia, sintiéndose además atraídos por la misma mujer, Colette, esposa de Chester. Estos 3 personajes, especialmente los de Mortensen e Isaac, son lo mejor de la película, así como la relación, primero llena de simpatía y cierta admiración, por parte de Rydell, y luego de necesidad y hasta de odio (aunque también de estima), entre los dos hombres, verdadera razón de existir de toda la historia y, por supuesto, de su final. Los dos actores hacen un gran trabajo y también Kirsten Dunts. Me gusta Tom Ripley y me gustan Rydell y Chester McFarland. Son personajes complejos que despiertan cierta ternura a los que, sin poder entenderlo en el fondo, no deseas que la policía o el perseguidor de turno atrape jamás.

Una buena adaptación de la obra de Patricia Highsmith, fiel a su ideario de personajes, en el fondo, perdedores que tienen ínfulas de aparentar ser quien no son y con el sueño casi secreto de salir de la mediocridad en la que irremediable están destinados. Es entretenida e interesante y me ha enganchado de principio a fin.