Es diferente verla ahora, al menos para mi lo es.
No veo al chico de Solo en casa, esa eterna película para poner en el bus en las excursiones de colegio.
Ha quedado ya algo difuminado ese pensamiento de “hay ciertas películas para chicos y para chicas”, aunque quizá me acompañe eternamente de una manera u otra.
Veo el significado de muchas cosas que rodeaban a alguien que apareció en mi vida, y eso es especial.
“-¿Porque crees que la gente tiene que casarse? … -Cuando eres mayor tienes que hacerlo.”
Ciertas frases no tendrían la fuerza que tienen en mi corazón, sino la hubiera conocido a ella.
La banda sonora, menudas canciones se escuchan por ahí, pura magia.
Verme reflejado en ese niño arrancando trocitos de hierba, nervioso, sin saber muy bien que todo esta cambiando.
Quizá veo a esa chica... aiss...ella. Única.
Un anillo cambia de color.
La emoción que siento ahora con esta película nunca la habría podido vivir sino la hubiera conocido a ella..
La niñez y la edad adulta, la muerte y la vida, y el cine también ... todo se entrecruza, todo unido, y al final solo quedas tu y lo que algo o alguien te hacen sentir por dentro.