‘’Cazadores en tierra inhóspita’’ es una secuela de la maravillosa e inteligente ‘’Concrete Utopia’’ de la que pudimos disfrutar el pasado 2023 gracias al director Um Tae-hwa. Justamente es eso y no cualquier otro motivo, lo que llama la atención sobre el film y te anima a visualizarlo.


La historia con un guion de Kim Bo-tong y Kwak Jae-Min sitúa la trama unos años después de lo transcurrido en ‘’Concrete Utopia’’ ofreciéndonos un escenario aún más desolador que está plagado de peligros, bandas callejeras, caos y locura.


Sin embargo, mientras la cinta de Um Tae-hwa realizaba un exhaustivo y profundo análisis del ser humano y del comportamiento en sociedad a través de unos personajes con arcos muy bien definidos y tramas igualmente ricas y complejas, en ‘’Cazadores en tierra inhóspita’’ el guion es sacrificado y las reflexiones se dejan completamente de lado. El film tiene solo un único propósito y este es ofrecer grandes secuencias de acción con peleas perfectamente coreografiadas, sangre a borbotones y gore del más bajo nivel. Buscar algo diferente en esta cinta es inútil. Tan solo es un festival de lucha y de gore absurdo y descerebrado.


Y eso para mí, que soy una persona que disfruta con una buena trama y un guion hábil e inteligente ha supuesto desconectar con lo que estaba viendo casi desde el minuto uno. Por muy carismático que sea el actor Ma Dong-seok al que ya conocimos en ‘’Tren a Busán’’ y que es famoso por sus trepidantes escenas de lucha, su actuación no es suficiente para llevar todo el peso del film.


El resto de personajes interpretados por actores y actrices muy famosos en Corea del Sur como la joven Roh Jeong-eui (‘’Our beloved summer’’, ‘’Kill it’’, ‘’Pinocchio’’), el idol y actor Lee Jun-young conocido como Jun (‘’Let me be your knight’’, ‘’Amarrados al amor’’, ‘’Brave citizen’’), Lee Hee-joon (‘’Mouse’’, ‘’Chimera’’, ‘’La paradoja del asesino’’, ‘’Virus’’) y Jang Young-nam (‘’Esta bien no estar bien’’, ‘’Como flores en la arena’’, ‘’Curso intensivo del amor’’) intentan hacer lo que pueden pero por mucho que se esfuerzan el guion no da mucho de sí y no pueden hacer brillar a unos personajes grises y desdibujados.


Desgraciadamente, la cinta no está a la altura de su predecesora y se convierte en otra obra de Netflix descerebrada y producida en masa de esas que abundan en su catálogo. Más que a ‘’Concrete Utopia’’ nos recuerda a la cutre y mediocre serie ‘’Black knight’’ pero en vez de repartir paquetes, esta vez el musculoso Ma Dong-seok reparte hostias a diestro y siniestro y aparte de un gran luchador él y su equipo se convierten en seres inmortales que lo resisten todo (desde puñaladas, caídas a gran distancia, tiros o palizas).


Si en ‘’Black Knight’’ era el aire, aquí el recurso estrella es el agua. Usan de nuevo el tema del científico loco (loco sin motivo o explicaciones lógicas o creíbles) que ya se está volviendo muy repetitivo y cansino y que nos recuerda sin remedio a otro científico loco, concretamente al de la segunda temporada de ‘’Sweet home’’. El director Heo Myeong Haeng mete en una batidora todos los tópicos más comunes y manidos del genero apocalíptico y los mezcla queriendo ofrecernos un coctel explosivo que no deja de ser una bebida demasiado rancia y vomitiva de esas que dejan especialmente mal sabor de boca.


Lo siento, para mí el cine es mucho más de lo que ofrece esta cinta. En algunos casos va a ser verdad eso de que ‘’segundas partes nunca fueron buenas’’. Esta cinta es la muestra perfecta de ello. Me quedo con ‘’Concrete Utopia’’.