Es una serie para maratonear en un fin de semana y no mucho más. No te deja nada, al principio la historia se desarrolla de manera interesante pero después se va perdiendo este interés. Capítulos muy largos que me costaba terminarlos, nunca llegué a engancharme por completo.
La mujer policía el 90% del tiempo era irritante y no te puede importar menos lo que le pase en su vida. El protagonista pasa sin pena ni gloria. La historia del detective es una incoherencia tras otra y no llegas nunca a empatizar con lo que le pasa tampoco.
En fin, es pasable pero al otro día te olvidás de que existe.