Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Charles:
6
Thriller. Drama Un adolescente es brutalmente asesinado delante de su padre. Éste, que es el único testigo del crimen, intenta vengarse matando a cada uno de los implicados en el homicidio, pero sus actos tendrán consecuencias inesperadas. (FILMAFFINITY)
19 de julio de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
No hay historia "de venganza" si el héroe no es vengativo.
Se pueden hablar de justicieros urbanos, de ejecutores, pero no de venganzas si lo que se quiere es restaurar un orden que había hasta determinado punto.

Esto es lo que, en sus limitados márgenes, propone 'Sentencia de Muerte'
Así de simple, una historia de venganzas que va de hecho sobre una venganza, cada vez más brutal y descarnada, y un héroe que no es justiciero ni ejecutor, simplemente es una persona puesta al límite que, como todos los animales arrinconados, ataca.
Lo grande es que cuenta con Kevin Bacon para dar vida a esta bestia parda, y a partir de ahí, todo se hace accesible: puedes empatizar en su impotencia, en su rabia, y hasta, incluso después, en su estallido de violencia. Porque es un ser humano real que quiere ver sangre por primera vez en su vida, y hasta parece comprensible.

La historia vive y muere por Nick Hume, al principio un padre de familia metódico y ejemplar, amado de sus amados, y trabajador nato. De hecho, una de las frases que mejor le define, para el baño de sangre que vendrá después, podría ser esa que le suelta a un trabajador cuando este le dice que por qué deberían elaborar datos que nadie va a ver; la respuesta de Nick es "por si alguien lo hace". Revelador.
Revelador cuando en el juicio contra el cabrón que le arruinó la vida "para sentirse más hombre" decide, en un sutil intercambio de miradas, que no va a dejar un trabajo mal hecho. Que va a eliminar el dato porque su conciencia nunca se va a perdonar encontrar un error tan enorme en su propia mente.

Un dato importante, y otro agradable foco de diferenciación, es que la venganza es gradual, su familia sigue corriendo peligro cuando lleva a cabo su venganza, y eso eleva la peligrosidad aparte de su propio descenso a los infiernos: siempre será peor saber qué puedes perder que lo que has perdido.
Aparte, Wan rueda con fuerza y sequedad, con momentos a veces casi oníricos como ese primer acto de venganza, en el lado muerto de la noche, en un callejón inundado de luz roja.

Casi lo mejor es darse cuenta de que, al final, lo realmente importante no era la venganza ni la familia, sino el propio Nick Hume.
Tras recibir la bendición del monstruo que inició su salvaje cruzada ("eres lo que yo he hecho de ti"), como si el mismo hubiera hecho su particular iniciación a la banda, se da cuenta mientras mira su antigua vida, quién sabe si tarde, que la vuelta atrás será un camino muy horriblemente largo.
Charles
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow