Si hay algo que me sorprende de esta película es que lo que nos explica es lo más normal del mundo, es algo que podría sucederle a nuestro compañero de trabajo, a nuestro vecino, amigo de toda la vida o incluso a nosotros mismos. Es una historia de desamor y esto mismo, que dos seres humanos no sientan los mismo, tiren para adelante y acaben separándose, es algo que sucede con más regularidad que las efervescencias juveniles y las exaltaciones gloriosas del alma humana. En cine estamos acostumbrados a ver cosas excepcionales (para eso es cine), pero la realidad es otra, de manera que "(500) Días juntos" se ajusta más a lo que somos que a lo que quisiéramos ser. Él es un tío normal que trabaja en algo que no le gusta y peca de sentimental; ella cree que se enamora de él y prueba, hasta que finalmente se va corriendo porque ya no aguanta más. Uno permanece en su sufrimiento y en la incomprensión, otro creerá que ha hecho lo mejor. Nada más real.

¿Por qué me gusta? Porque desde que empieza con esa dedicatoria se observa un estilo propio y claro, eso puede no gustar, la aleatoriedad de los 500 días es algo diferente que a algunos disgusta, yo esa rareza la aplaudo porque me parece sobre todo eficaz. Así que no es una comedia romántica cualquiera, por lo visto hay buen cine en el S.XXI, aunque esta película sea sólo un destello que aparece entre la mediocridad general... O no, tal vez todo brilla y yo soy el mediocre, ¿qué más dará?; la cuestión es que "(500) Días juntos" pese a ser una producción famosa me ha gustado. Por lo dicho, porque es más real que el resto.

Eso sí, la niña rubia, ¿alguien sabe quién es?; ¿me he perdido en algo?; ¿una consejera adolescente? Pues hasta eso me gustado, pese a la falta de definición, lo mismo que me gusta la banda sonora y la actitud de ella, seguramente censurada por la mayoría. El caso es que a todos nos suena la historia, el principio, el desenlace, incluso los secundarios.