He aquí una curiosa y muy desconocida producción de terror de serie B, con criatura fotofóbica incluida.
Siempre me han parecido interesantes estos films que juegan con la luz (como arma y refugio) y la oscuridad (como morada del mal y muerte segura), que es también uno de los terrores irracionales más comunes en el ser humano. No ver lo que tenemos delante hace que imaginemos que hay cualquier cosa, aunque los protagonistas sí que se pueden encontrar con el fantasma maldito de una bruja, cuya leyenda conocemos en un interesante prólogo que mezcla fotos viejas con fuego.
La película no hace historia y se olvida con facilidad. "Nunca apagues la luz" o "Pitch black", entre otras, han aprovechado mucho mejor esta forma de hacer cine fantástico.
Pero por alguna razón, tengo que reconocer que me gusta, incluso la he visto varias veces.
La criatura no está demasiado bien hecha, pero la historia es entretenida por su ritmo, su escasa duración (82 minutos con los créditos no es para que se haga pesada) y por las situaciones de "acción" (por decirlo de alguna forma) con el fantasma.
Por cierto, se nota que cuando la hicieron no había llegado todavía la gran expansión de los "smartphones", porque si no, habría habido seguro alguna escena con la linterna de un móvil.
Y el niño del principio, ¿no es un poco grande ya para andar perdiendo dientes?
En fin, sé que no es excesivamente buena, pero tengo debilidad por el género, y para mí, cumple (aunque mucho más por entretenimiento que por dar miedo).